martes, 11 de mayo de 2010

DICCIONARIO LUNFARDO

QUÉ ES EL LUNFARDO
No se considera al lunfardo un idioma, un dialecto ni una jerga: entre otras cosas, porque carece de sintaxis y gramática propias. Quien emplea palabras lunfardas, piensa en español, usando las estructuras y la gramática castellanas, y luego reemplaza una o más de esas palabras por sus sinónimos lunfardos. Así, el significado último del discurso no cambia, pero toma un matiz diferente.

Una definición de lunfardo (Gobelo): "Vocabulario compuesto por voces de diverso origen que el hablante de Buenos Aires emplea en oposición al habla general". Otro aspecto importante es que el uso de esas palabras es absolutamente consciente: uno sabe que existe la palabra mujer, pero a veces decide emplear mina; uno conoce la palabra dinero, pero en ocasiones elige guita. Esta podría ser una distinción entre lunfardismo y argentinismo: a veces, sin saberlo, usamos palabras con un sentido que no es el que aparece en el diccionario. Cuando usamos recova, no lo hacemos con la intención de darle a nuestro discurso un toque divertido, porteño, interesante, juguetón, o que nos haga aparecer como conocedores: simplemente, no conocemos la palabra soportal.

El lunfardo y el tango nacieron en la misma época y en el mismo lugar.

En las últimas décadas del siglo XIX y en las primeras del siglo XX (aproximadamente entre 1875 y 1914), una gran inmigración europea llegó a la Argentina, y buena parte de ella se asentó en la creciente ciudad de Buenos Aires, especialmente en sus arrabales o en conventillos, donde tenían como vecinos a integrantes de las clases bajas locales.

Y a la hora de divertirse, los jóvenes extranjeros coincidían con los jóvenes criollos, los compadritos, en los prostíbulos. Allí, el inmigrante iba como cliente, y el compadrito, como cliente o como fiolo (proxeneta) de una o más mujeres. Con el paso de los años, también los extranjeros incursionaron en el negocio de la prostitución, especialmente franceses y polacos de origen israelita.

Algunos periodistas, como Benigno Lugones y Juan Piaggio, tomaron nota del avance de estas palabras en el habla porteña y lo reflejaron en sus artículos; pero repararon fundamentalmente en las palabras usadas por los delincuentes, aunque este último acuñó la expresión "argentinismos del pueblo bajo". El mismo enfoque tuvieron investigadores como Luis Drago o Antonio Dellepiane, que publicaron sendos libros tratando el tema desde ese punto de vista. De hecho, la asociación entre este vocabulario y el delito se da a partir del nombre que se le dio a aquel: lunfardo es la palabra que usaban los ladrones para nombrarse a sí mismos. Ciertas palabras, en efecto, pertenecían a la jerga de los delincuentes, pero muchas otras correspondían al ámbito de la vida cotidiana.

Con algunas de esas palabras aportadas por los inmigrantes y con otras que circulaban en la ciudad provenientes del gauchesco se formó el lunfardo.

Además de esas dos ramas principales, integran el vocabulario lunfardo palabras inventadas (algunas, a través del intercambio de la posición de las sílabas, procedimiento conocido como vesre –ortiba, feca–, y otras de origen incierto, como mandanga o trolo) y palabras castellanas resignificadas (marrón 'ano', moco 'error importante'). Este tipo de palabras ha crecido en porcentaje dentro del conjunto de palabras lunfardas a medida que ha transcurrido el tiempo.

Si afirmamos que el lunfardo es sólo un vocabulario, un conjunto de sinónimos que cada hablante usa para dar un matiz a su discurso, esto se debe en enorme medida a la escuela pública.

Con los años, el lunfardo fue extendiéndose por todas las clases sociales, a partir de la difusión que le dieron las letras de tango, el teatro (fundamentalmente, los sainetes) y cierto periodismo popular, y debido, asimismo, a la movilidad social, que llevó a muchas personas que en esa época vivían en la pobreza a los estratos medios y altos de la sociedad.

En la década del 30, el tango, a través de la radio, llevó masivamente estas palabras a hogares donde con toda probabilidad se las conociera; pero, sobre todo, ayudó a darles cierta legitimación, ya que a menudo se las consideraba como algo a superar, algo que deturpaba el lenguaje, algo propio de las clases bajas.

Ya a mediados de la década del 20, comenzaron a surgir autores de letras de tango que prescindían de las palabras lunfardas, como Homero Manzi, que apenas las usa. Para ese tiempo, también, cambia, aunque sea parcialmente, la temática de los tangos, y estos comienzan a abandonar lentamente las historias del bajo fondo (más propicias, a priori, para las palabras lunfardas) y se interesan por la nostalgia, como Manzi, o la moral, como Discépolo.

A comienzos de la década del 40, la presión de los grupos puristas se hizo sentir, y el lunfardo fue prohibido en la radio. No hubo una ley ni un decreto que lo censurara. Probablemente, se haya tratado de una orden interna, verbal o escrita, del organismo que regulaba las comunicaciones, o de una reinterpretación del marco legal vigente. Los autores debieron cambiar las letras de sus tangos que contenían palabras lunfardas, o resignarse a que no se los difundiera. Obviamente, los tangos compuestos en aquellos años carecían de lunfardismos. El gobierno de Perón, también de un modo impreciso, puesto que no hay documentos de ello, levantó la prohibición a finales de la década del 40.

A partir de mediados de la década del 50, el tango comienza a decaer, y junto con él todo lo referido a la cultura popular. Hay quienes resaltan la coincidencia temporal entre esta decadencia de lo popular y el derrocamiento del gobierno de Perón. Como fuere, los productos culturales difundidos por la radio y la novedosa televisión cambiaron; al mismo tiempo, fueron quedando atrás los lugares y las costumbres de los que hablaban los tangos.

Pero, a finales de los años 60, surge el llamado rock nacional, originariamente llevado adelante por grupos de jóvenes que no participaban de la masificación propuesta, y nuevas palabras comienzan a surgir. La cultura rock es el soporte en el que circulan palabras como pálida o copar. Si esas palabras pueden ser consideradas lunfardas es asunto de discusión. Personalmente, creo que un hecho que se produjo recién en la segunda mitad de la década del 80 permite juzgarlas como tales. Hablo de la masificación del rock –que fue lenta pero incesante en los 70, y exponencial a partir de la guerra por las Malvinas– y de su llegada a las clases bajas de Buenos Aires, junto con una revalorización de lo popular, en la que mucho tuvieron que ver Sumo, los Redonditos de Ricota y los grupos punks de la época.

La recuperación de la calle, de la vivencia cotidiana, la reivindicación de la estética de la ginebra de Sumo, la urgencia y lo explícito de las letras punks y el público que comenzó a seguir masivamente a los Redondos contrastaban radicalmente con las alucinaciones solipsistas de Spinetta o la vocación de estrella del subdesarrollo de Charly García.

A partir de esa época, las palabras que podríamos llamar "de los jóvenes" o "del rock" comenzaron a circular en boca de estos jóvenes junto con palabras del lunfardo que podríamos llamar "tradicional" o "del tango", nombrando una misma realidad sin que se noten los cien años que las separan. Así, nos encontramos con la convivencia de yuta y fumanchero, de faso (aunque resignificada; ya no 'cigarrillo', sino generalmente 'cigarrillo de marihuana') y pete.

Esa línea se profundizó en los años 90, con grupos entre los cuales se destacan por su masividad La Renga, Los Piojos, Divididos y hasta Los Caballeros de la Quema, cuyo cantante y letrista, Iván Noble, es seguramente quien ha utilizado más lunfardismos en sus canciones. Por otra parte, en los últimos años de esa década, algunos grupos de la llamada "música tropical" comenzaron a desarrollar en sus letras una temática completamente distinta de la habitual: Guachín, Yerba Brava y Flor de Piedra abrieron el camino de lo que popularmente se conoce como "cumbia villera". Estas canciones no siempre son un mero estribillo, generalmente con doble sentido, y, con suerte, algunos versos más o menos referidos a aquel. Por el contrario, nos encontramos con canciones que describen (con todas las salvedades que pueden hacerse) ambientes de la clase baja, muchas veces marginales, con crudeza y de un modo explícito.

Como en todo idioma, dialecto, vocabulario, etc., con el paso de los años, algunas palabras han desaparecido (afnaf ), otras han permanecido (cana), algunas han surgido (masa), otras se han resignificado (grela) y hasta hay algunas (pibe) que han sido admitidas en el Diccionario de la Real Academia Española.

No obstante, la desaparición del uso cotidiano de palabras como amurar, embrocar o fesa en absoluto permite inferir una merma en el uso del vocabulario lunfardo. Si tomamos, por ejemplo, la última edición del Diccionario de la Real Academia Española, editada en 2001, y comparamos las palabras que registra con las que trae una edición de la primera mitad del siglo XX, veremos que la diferencia es notable. Pues bien, en los dialectos, argots, vocabularios marginales (o marginados), etc., debido a su intrínseco dinamismo, mucho mayor que el de los idiomas, esas variaciones son enormemente más frecuentes.


LETRA A

A la gurda: Refugio, guarida.
Abacanado: Presuntosos
Abanicar: Agente Policial
Abanicarse: Irse.
Abanico: Soplón / Agente policial.
Abaragar: Parar con el cuchillo los golpes del adversario
Abatatado: Asustado.
Abatatarse: Asustarse.
Ablandado: Asustado / Sobornado.
Ablandar: Sobornar.
Ablandarse: Asustarse.
Abocado: Irreflexivo.
Abocarse: Precipitarse.
Abombado: Tonto.
Abotonado: Casado (abrochado, acoyarado, casoriado).
Abotonarse: Casarse.
Abrancar: Atrapar.
Abricola: Distraído
Abriles: sinónimo de años.
Abrir cancha: Despejar el sitio de una contienda
Abrirse: Apartarse, desviarse, hacerse a un lado
Abrochado: Casado.
Academia: Salones de baile, mujeres, tragos
Acamala: Guardar, cargar
Acamalador: Tacaño.
Acamalar: Acaparar / Proteger / Atrapar, asir / Ahorrar mezquinando.
Acamalarse: Amancebarse.
Acanalar: Herir con arma blanca
Aceitado: Sobornado.
Aceitar los patines: Prostituir, cafishiar.
Aceitar: Sobornar.
Aceite, dar el: Despido.
Aceite, tomarse el: Irse rápidamente.
Aceite: Soborno.
Aceitosa: Cabeza.
Aceitunas, cambiar el agua de las: Orinar.
Aceitunas, le dieron las: Despido.
Aceitunas, tomarse las: Irse rápidamente.
Achacado: Achacoso.
Achacador: Malhechor.
Achaco: Robo.
Achicar: Acobardar
Achuchado: Asustado.
Achumado: Ebrio.
Achumarse: Embriagarse.
Achurar: Asesinar.
Acomodado: Recomendado.
Acomodar: Recomendar, influenciar / Zurrar.
Acomodo: Influencia favorable.
Acoyarado: Casado.
Acoyarse: Casarse.
Acuñado: Recomendado.
Acuñar: Recomendar, favorecer.
Adicón: Factura de gastos del restaurante.
Adobado: Ebrio.
Adobarse: Embriagarse.
Adornado: Sobornado.
Adorno: Soborno.
Afanancio: Ladrón.
Afano: Robo.
Afiabrar: Matar.
Afiambrado: Asesinado.
Afilador: Cortejante.
Afilar: Festejar
Aflojar: Delatar.
Afrecho: Apetito sexual.
Afrechudo: Rijoso.
Africar: Entregar con fuerza
Agachada: Deslealtad, vileza.
Agarrada: Disputa.
Agayas, de: Valiente.
Agayudo: Valiente.
Agrampar: Atrapar, asir.
Agrandado: Ostentoso.
Aguantiñar: Afrontar, soportar.
Águila / Aguilero: Indigente.
Ainenti: Piedritas (Juego de niños).
Al bardo: Salir a robar sin un plan determinado:
Al pucho: De inmediato.
Alacrán: Chismoso.
Alacranear: Chismosear.
Alacransar: Hablar mal
Alambrada: Guitarra.
Alca: Alcahuete.
Alcachofa: Alcahuete.
Alcagüetería: Delación.
Alcancía: Cárcel.
Alcaucil: Alcahuete.
Alce: Ocasión.
Alfajía: Alto.
Alfiler: Arma blanca.
Aliviar: Robar.
Almanaques: Edad, años
Alpedología: Hablar sobre un tema sin conocimiento.
Alpiste: Bebida alcohólica.
Alpistería: Bar, licorería.
Alpistero: Ebrio.
Altiyero: Excelente.
Altiyo: Cabeza.
Alumbrante: Fósforo
Alumbrar: Proveer dinero
Alzado: Rijoso.
Alzarse: Irse.
Amachimbrado: Amancebado.
Amargo: Cobarde.
Amarrete: Tacaño.
Amarretear: Mezquinar.
Amarretismo: Mezquindad.
Amarro: Tacaño.
Amarrocador: Tacaño.
Amarrocar: Atesorar.
Amarroto: Amarrete
Amarroto: Tacaño.
Amasijado: Asesinado / Zurrado.
Amasijar: Zurrar / Matar.
Amasijo: Castigo, zurra.
Ambidextro: Pederasta, activo y pasivo.
Ambiguo: Afeminado.
Amueblada: Albergue transitorio.
Amurado: Abandonado.
Amuro: Cárcel.
Ana-Ana: Por mitades.
Analfa: Ignorante.
Analfabestia: Ignorante.
Añapar: Atrapar.
Ancu: Como araca, voz de alarma.
Andante: Peatón.
Anduma: Vamos
Angelito: Cándido.
Angelito: Herramienta para abrir cerraduras desde afuera.
Antenas: Orejas.
Antropófago: Invertido.
Apampada: Desorientado.
Apañado: Encarcelado.
Apaparse: Desorientarse.
Apedado: Ebrio.
Apedarse: Embriagarse.
Apestiyado: Zurrado.
Apiolado: Despabilado.
Apiolar: Despabilar.
Apiolarse: Despabilarse.
Aplicar: Encarecer.
Apoliyar: Dormir, holgar.
Apoliyo, de: Durmiendo.
Apoliyo: Dormir
Aprontar: Hacer correr los caballos de carrera
Apronte: Movimiento preliminar, entrenamiento, preparativos
Apuntador: Batidor, delator.
Apuntamento: Conquista amorosa.
Apuntar: Delatar / Conquistar amor.
Apunte, llevar el: Atender.
Apunte: Delación.
Araca: Atención! Cuidado
Araña: Voz de alarma, lo mismo que araca.
Arbolito: Levanta juego clandestino.
Archivado: Encarcelado.
Argoya: Crica.
Armarse: Progresar, enriquecer.
Arrabal: barrio de extramuros donde alguien canta o baila un tango.
Arranyar: Castigar.
Arrastre: Prestigio / Predicamento / Influencia.
Arrayar: Arreglar
Arrebezarse: enojarse, insoentarse.
Arreglo: Soborno.
Arriba, de: Gratuitamente.
Arribeño, de: Gratuitamente.
Arrimado: Amancebado.
Arroyarse: Asustarse.
Arrugado: Bandoneón. Asustado
Arrugarse: Asustarse.
Arrugue: Temor.
Artículo, dar: Atender.
Asfalto: Experiencia.
Asnaf: Por mitades.
Asoleado: Chambón.
Aspamento: Ostentación.
Astiya: Parte de robo.
Astiyado: Reparto de robo.
Asunto: Mujer.
Atenti: palabra que sirve para llamar la atención o advertir de algún peligro.
Atorado: Atolondrado.
Atorniyar: Ahorrar mezquinando.
Atorra: Vago, holgazán.
Atorradero: Vivienda humilde del vago o soltero.
Atorrancia: Vagancia.
Atorranta: Ramera
Atorrante: Sinvergüenza
Atorrantear: Vaguear.
Atorrantismo: Vagancia.
Atorrar: Dormir; vago; mujer entregada al vicio (caños de agua corriente)
Atorro: Vivienda del tipo vago o del soltero.
Atracar: Acercar, arrimar
Atrasado: despistado, distraído, tonto.
Ave Negra: Abogado
Avería, de: Malhechor.
Avivada: Viveza / Engañifa
Avivado: despabilado, desvergonzado.
Avivar: Advertir, despabilar.
Avivarse: Despabilarse.
Avivato: Despabilado, aprovechador.
Azotarse: Arrojarse, decidirse.
Azotea: Cabeza ; tener gente en la azotea ; facultades mentales alteradas.
Azotetis: Somatización de origen psíquico.

LETRA B

Bacán: Concubinario; hombre que mantiene una mujer; bien de plata
Bacanaje: poderosos, oligarcas.
Bacanazo: Refinado.
Bachicha: gordo, panzón. El que siempre piensa en comer.
Bagaseta: Ramera.
Bagayero: Contrabandista.
Bagayito: Equipaje
Bagayo: Mujer desgarbada; paquete envoltorio; deportista torpe
Bagre: Estómago ("me está picando el bagre")
Baile: Desorden (Merengue).
Bailetín: Fiesta bailable modesta.
Bailongo: baile nombrado despectivamente / desorden, pelea.
Balconear: Observar, mirar.
Baldosa / balero: Cabeza.
Balero: Cabeza
Balurdo: Mentira, embrollo, engañar
Banana, muy de la: Excelente.
Banca: Influencia / Banquero.
Bancar: pagar.
Banda, en: Indigente.
Bandeado: Indigente / Achacoso.
Bandearse: Fracasar.
Bandera / banderola: Aspaviento.
Banderudo: Ostentoso.
Bandola: Bandoneón.
Baño: Retrete.
Baranda: Olor desagradable
Baratieri: Ocasión.
Barato, es un: Ordinario.
Barato, un: Ocasión.
Barbijo: Cicatriz en el rostro causada por arma blanca.
Bardo, al: Inútilmente.
Barra Brava: Pandilla.
Barra: Palomilla
Bartolero: Desordenado / Negligente.
Barullero: Alborotador
Basuriar: Humillar
Batacazo: Éxito inesperado
Bataclana: Mujer, artista de teatro con el pretexto de cantar y bailar
Batata: Temor.
Bate: Delata.
Batida: Delación.
Batidor: Alcahuete.
Batifondero: Alborotador.
Batifondo: Desorden, lío.
Batilana: Alcahuete, delator.
Batilio: Alcahuete.
Batimento: Delación.
Batir: Decir, delatar
Batista: Delator.
Batistela: Delator.
Batistín: indiscreto, incapaz de guardar un secreto.
Batitú: Delator.
Batuque: Desorden, lío, confusión.
Bebe: Prostíbulo, quibebe.
Beberaje: Bebida alcohólica.
Bebestible: Bebida alcohólica.
Beguen: Capricho amoroso con deseo vehemente; cariño
Bejarano: Viejo.
Beligerancia: Dar, atender.
Belín: Nada.
Belinún: Tonto.
Berreta: Ordinario. Cualquier objeto falsificado.
Berretín: Capricho, ilusión
Bestia: Mujer (arcaísmo)
Betún: Soborno.
Biaba: paliza
Biabado: Zurrado. Drogado
Biabazo: Puñetazo.
Biandazo: Puñetazo.
Biandún: Puñetazo.
Bichicome: Tipo que juta desperdicios, vagabundo.
Bichoco: Achacoso. De mucha edad o con apariencia a viejo.
Bicicleatear: Eludir, trampa comercial.
Bicicleta: Elusión, trampa comercial.
Bicicletero: Informal comercial.
Bienudo: Adinerado.
Bife: Cachetada a mano abierta
Bigotear: Observar fijamente.
Biógrafo: Aspaviento.
Biorse: baño.
Biromista: Levanta juego clandestino.
Bisagra: Alcahuete.
Biyuya: Dinero
Biyuyera: Billetera, cartera.
Blanbeta: Charlatán.
Blanca, la: Cama.
Blanco, la de: Muerte.
Blandengue: Blando; alusión a una erención a medida
Bobo: Reloj, corazón
Boca de: Trampa que permite ver la boca del mazo sobre una esponja.
Bocado: Soborno.
Bochín: Cabeza.
Bochinche: Algarabía
Bocho/a: Cabeza.
Bocina: Alcahuete.
Bocinazo: Delación.
Bocón: Soplón.
Bodega: Estómago.
Bodegón (Esp.): Taberna
Boga: Abogado.
Bogólico: Tonto.
Bola, dar: Atender, prestar atención.
Bola: Impotancia
Bolacear: Mentir.
Bolacero: Mentiroso.
Bolada: Ocasión.
Bolas tristes: Tonto.
Bolas, en: Desnudo
Bolazo: Mentira
Bolche: Bolchevique, seguir doctrina comunista
Boleado: Chambón, torpe. Desorientado.
Bolearse: Desorientarse.
Boleta, hacer la: Matar.
Boleta: Hacer boleta, matar
Boleteado: Asesinado.
Boletear: Matar / Asesinar. Mentir.
Boletero: Mentiroso.
Boleto: Mentira.
Boliche: Cantina
Bólido: Tonto, lento.
Bolilla: Noticia, chisme
Boliya, dar: Atender.
Bolo: Mentira.
Bolsa, hacer: Zurrar.
Bomba: Beldad.
Bombear: Fornicar. Estafar, defraudar.
Bombero: arbitro que perjudica a un equipo.
Bombo, ir al: Componenda.
Bombo: Nalgas, asentaderas.
Bombón: Beldad.
Bonafide: Cándido.
Boncha: Chabón, tonto
Bondi: Ómnibus
Borbona: Guitarra.
Border: Se dice del paciente fronterizo entre neurosis y psicosis.
Borrachería: Bar, despacho de bebidas alcohólicas.
Borrado: Retirado. Muerto.
Borrarse: Irse.
Borregada: Muchachada.
Borrego: Muchacho.
Botas, ponerse las: Progresar.
Botijas: Niño.
Botón, al divino: Inútilmente.
Botón: Agente policial, guardia
Botonazo: Alcahuete.
Botoneo: Delación.
Boyo: Puñetazo.
Bramaje: Mujeres.
Breca: Enojado.
Breto: Sobretodo / Ataúd.
Breva: Beldad / Ocasión.
Brígido: Tonto.
Brilllos: Alhajas
Brique: Fósforo.
Brisco: Invertido.
Briyo: Brillante.
Brodo, al: Arruinarse económicamente.
Brodo: Estafa, fraude.
Bronca: Rabia
Broncar: Enojarse.
Buchón: persona delatora.
Budín: Mujer hermosa
Budinazo: Beldad.
Buenudo: Tonto.
Bufa: Bujarrón, sadomita.
Bufonazo: Balazo.
Bufoso: Revolver
Bule: Puñetazo.
Bulevar: calle ancha con plazoleta en el medio.
Bulín: Habitación, cuarto, aposento, vivienda de soltero.
Buque sin mancada: Disimulo
Buraco: Agujero
Burrero: Ladrón de cajas registradoras.
Burro: Ignorante.
Burros: Caballos.
Busca: Pícaro, despabilado / Ramera.
Buscaglia: Buscavidas.
Buscapleitos: Abogado.
Bute: Excelencia, gran calidad
Buyón: Alimento, comida
Buyonear: Comer.
Buzarda: barriga, panza, Estómago.
Buzón: Sodomita / Boca grande / Cárcel.


LETRA C Y CH

Cabalete: Bolsillo de saco (superior externo).
Cable, tirar un: Socorrer.
Cabrear: enojar, molestar con bromas de mal gusto.
Cabrearse: Enojarse.
Cabrero: Enojado.
Cabrón / cabronazo: Cornudo.
Cábula: Cábala.
Cabulear: Presentir, agorar.
Cachaba: Asía, atrapaba.
Cachaciento: despacioso, lento para ejecutar cualquier acción.
Cachada: Broma, mofa.
Cachador: Burlón.
Cachar: burlar, timar
Caché: Cursi.
Cachería: Cursilería.
Cachetada / cachetazo: Bofetada.
Cachiporra: pegar.
Cachirulo: Cándido.
Cacho: Parte robo / Trozo.
Cachucha: Crica.
Cachusiento: Achacoso, deteriorado.
Cachuso: Achacoso, deteriorado.
Cadenero: Proxeneta.
Caduta, la: Decadencia.
Cafaña: Rústicos, ordinarios.
Café: Reprimenda.
Caferata: Rufián, proxeneta.
Cafetear: Reprender.
Cafetera: Vehículo desvencijado
Cafiolo: Cantinflero, vivir de la mujer prostituta
Cafirulo: Rufián, proxeneta.
Cafisho: Gigoló, vividor
Cafúa: Cárcel.
Cajetear: Estafar, defraudar.
Cajetiya: Petimetre.
Calá: Mirar, observar
Calabaza: Cabeza.
Calabocear: Apresar.
Calado: Conocido.
Cálalo: Estudio de lo se ha de robar.
Calandraca: Achacoso, deteriorado.
Calar: Observar; examinar atentamente
Calavera: trasnochador, licencioso, desenfrenado.
Calce: Ocasión.
Caldosa: Puñetazo que provoca sangre.
Calentón: Rijoso.
Calentura: Apetito sexual / Enojo.
Caliente: Rijoso, enojado.
Calle: Experiencia.
Calo: Trozo.
Calor: Vergüenza.
Calotear: Robar.
Camambuses: Zapatos.
Camasutra: Cama
Camba: forma vérsica de bacán.
Cambusería: Poderosos, oligarcas
Camelo: engaño, trampa, farsa.
Caminantes: Zapatos.
Camisulinero: Especialista en sustraer desde el bolsillo del chaleco.
Camorra: pelea, riña.
Camote: Enamoramiento obsesivo.
Campana: Ayudante del ladrón que vigila.
Campaniya: Alcahuete
Campante: despreocupado, impávido.
Cana: prisión
Canal: Cicatriz de arma blanca en el rostro.
Canasta: Cárcel
Cañazo: Cópula.
Cancel: Verja o puerta que cierra el zaguán
Cancha: patio, corral o recinto más o menos espacioso.
Cancherada: Aspaviento, alarde.
Cancherear: Alardear.
Canchero: Conocedor, perito
Candidato: Cándido.
Canejo: Caray! (interjección)
Canela: Cárcel.
Canero: Relativo a la carcel
Canfinfla: Rufián.
Canfinfle: hombre que se deja querer.
Canfli: Aprocope de la canfiflero, proxeneta
Canflia: Proxenestismo, rufianismo
Canflinfero: Rufián, proxeneta.
Cangrejo: Sodomita.
Canguela: Temor / Indigencia / Prostíbulo.
Canillita: chico vendedor de diarios en la vía pública.
Caño: Vivienda de soltero.
Canoa: Cárcel.
Canoas: Zapatos.
Caños, a los: Indigencia.
Cañota: Cárcel.
Cantar: Delatar. Confesar un delito.
Cantor: Elegante / Alcahuete.
Canusa: Afectivo de cana, carcel
Canuto: Tubo de metal que los presos esconden dinero o droga
Canyengue: Arrabalero de baja condición social, bailes con muchos cortes.Con ritmo estilizado.
Capacha: Cárcel.
Capanga: Jefe o capataz / Arbitrario / Autoritario.
Capelo: Sombrero.
Capelun: Aumentativo de capelo, sombrero
Capiya: Cabeza.
Capo: Jefe
Caquero: Petimetre.
Caracúlico: Enojado, pesimista.
Caraculismo: Enojo, pesimismo.
Caradura: Desfachatado.
Caralisa: Rufián, proxeneta.
Carata: Desfachatado.
Carbura: Funciona.
Carburadora: Cabeza.
Carburar: pensar, idear.
Carcamán: italiano de mal aspecto
Careta: Persona atrevida, desfachatada.
Cargada: Mofa / Chance.
Cargador: Promiscuo.
Cargar: Mofarse.
Cargosear: Fastidiar.
Caripela: Cara.
Carnavales: Años / Edad.
Carón: Cara grande.
Carozos: Ojos.
Carpa: Astucia
Carpeta: Categoría
Carpetear: Observar disimuladamente.
Carpetero: Ducho, habilidoso.
Carpusa: Experiencia.
Carreteles: Años / Edad.
Carrindanga: Armatoste / Vehículo desvencijado.
Cartabón: Prontuario.
Cartero: Delincuente que coloca y revisa el “correo”.
Cartón: Chabón.
Carucha: Cara.
Casa del Pueblo: Cementerio.
Casatero: Cumnilinguo.
Cascada: Zurra, paliza.
Cascar. Castigar, pegar
Cáscara: Aspaviento.
Cascarazo: Bofetada.
Cascarria: Trompo viejo, ya inservible.
Cascarriento: Raído, sucio.
Cascarse: Drogarse, doparse.
Cascarudo: Valiente, decidido.
Cascote: Achacoso, deteriorado.
Casimba: cartera, billetera
Casiorarse: Casarse.
Caso: Tonto
Casoriado: Casado.
Caspera: Cabeza.
Castaña / castañazo: Puñetazo.
Catanga: Persona de color
Cataplasma: Latoso, fastidioso.
Catar: Atrapar, agarrar.
Catinga: Tufo.
Catramina: Armatoste, vehículo desvencijado.
Catrera: Cama
Catriela: Mujer.
Caturo: Agarro, tomo, capturo, comprendo
Cautivo: Peso de moneda nacional.
Cayetano: Callado.
Cazote: Puñetazo, golpe.
Centro, tiene: Experiencia.
Cepiyada: Reprimenda.
Cerebrar: Función mental
Chabón: Tonto
Chabona: Mujer.
Chabonada: Torpeza.
Chabonaje: Tontos (Grupo).
Chabonazo: Chabón.
Chacabuco: Enfermoso.
Chacado: Enfermo.
Chacador: Malhechor.
Chacamento: Robo.
Chacar: Robar.
Chafalote: Ordinario.
Chafe / chaferola / chafo: Agente policial.
Chaira: Herramienta para afilar
Chala: dinero
Chalado: Enamorado, apasionado.
Chaludo: Adinerado.
Chamuchina: Chusma / Fruslería.
Chamullar: Conversar, murmurar
Chamuscado: Enojado.
Chamuya: Habla.
Chamuyeta: Charlatán, persona que habla de más.
Chance: Ocasión.
Chanceleta: Afeminado / Mujer.
Chanceletas, en: Abandonado.
Chanchada: Vileza, deslealtad.
Chancho: Informal, tramposo, raído, sucio / inspector de transporte.
Changa: Trabajo breve.
Changar: Trabajar brevemente, trabajo pasajero.
Changüí: ventaja, engañoso
Chanta: Informal, tramposo.
Chantapufi: Informal, tramposo. Persona que contrae deudas sin intención de saldarlas.
Chantar: Endilgar, enjaretar.
Chantún: Informal, tramposo.
Chantunazo: Informal, tramposo
Chapaliar: Pisar, caminar
Chapar: Agarrar, tomar, asir
Chapas: Cabellos.
Chapeta: Chabón.
Chapetonada: Torpeza, tontería.
Chaquetero: Pancista.
Charamusca: Fruslería.
Charleta: Charlatán, tipo que habla sin fundamento.
Chata: Carruaje de caballos
Chaucha: Ocasión / pene / tonto / centavo.
Chauchón: Tonto.
Checonato: Cheque.
Chefun: Aumentativo de funche, que es inversion silábica de Funge o Funyi, sombrero
Chicato: Miope, cegatón
Chiche: Revólver.
Chichipió: Tonto.
Chichonear: Bromear, mofarse de alguien.
Chichoneo: Broma, mofa.
Chiflado: Loco
Chimenea: Cabeza.
Chimentero: Chismoso, murmurador.
Chimento: Chismerío.
China: Mujer
Chinchera: Cama.
Chinchudo: Enojado.
Chingada: Yerro.
Chingar: Errar, fracasar.
Chingolo: Cándido.
Chipola: Excelente.
Chiqué: Aspaviento.
Chiquetero: Exagerado, "largo"
Chiquilín: Chiquillo / Bolsillo chico del pantalón (adelante).
Chiquilinada: Chiquillada.
Chirlo: Bofetada.
Chirola: Monedita.
Chirrinada: Rebelión militar.
Chirusa: Muchacha (despectivo).
Chispeado: Achispado.
Chispear: Observar / Mirar.
Chitrulo: Tonto, "menso"
Chivado: Enojado.
Chivarse: enojarse
Chivatazo: Enojo / Delación.
Chivateli: Barbado.
Chivato: Alcahuete / Barbado.
Chivo, olor a: Tufo.
Chivo: Barbado / Enojado.
Choclo: Desorden, lío
Chocolatero: Chabón.
Chorear / Chorrear: Robar.
Choreo: Robo.
Chorizo: Ladrón
Chorlito: Cándido.
Chorro: Ladrón
Choto /a: Achacoso /a.
Chubasco: Reprimido.
Chuca: Ebriedad.
Chuchi: Muchacha.
Chucho: Temor / Cabello.
Chumbazo: Balazo.
Chumbo: Balazo / Revólver.
Chupadín: Borracho.
Chupado: Borracho.
Chupamedias: Obsecuente.
Chupandina: Borrachera.
Chupar: Beber.
Chupe /i: Bebida alcohólica.
Chupería: Bar, despacho de bebidas alcohólicas.
Chupete: Ebrio
Chupín: Ebrio.
Churrasca: Beldad.
Churros: Beldad.
Chusmaje: Cáfila.
Chusmear: Chismear.
Chusmón: Murmurador
Chuza: Látigo sin lonja
Ciego: Carente de dinero es término de juego del truco
Cien, número: Retrete.
Cimarrón: nombre con que se designa al mate amargo.
Cinchar: dar fuerza, vigor. Trabajo duro.
Cinchar: Trabajar, esforzar.
Circulado: Baquiano, experto.
Cirquero: Paciente de comportamiento muy teatral.
Ciruja: persona que comercia con residuos
Cirujano: Junta huesos, desperdicios.
Claraboyas: Ojos.
Clavado: Exacto
Clavar: perjudicar.
Clavarse: Perjudicarse.
Cliente: Candidato.
Clines: Cabellos largos y desprolijos.
Clinudo: Pelilargo, desprolijo.
Cobrar: Recibir castigo.
Coca: Cocaína.
Cocacolonización: Coloniaje.
Cocear: Presentir.
Coceo: Cábala.
Cocina: Estómago.
Cocinado: Muerto, asesinado.
Cocinar: Matar.
Cocinero: Cinco pesos.
Coco: Cabeza.
Cocó: Cocaína.
Cocota: Ramera.
Codeguín: Tonto.
Cogote: Gratuitamente.
Cogotudo: Adinerado, oligarca.
Coima: Soborno.
Coimear: Sobornear.
Cojudo: Valisnte, decidido.
Cola: trasero
Colado: Garrón.
Colarse: Gorronear.
Colchonear: Dormir, holguear.
Colgado: Despedido, cesanteado.
Colibriyo: loco, insensato, perturbado mental.
Cometa: Soborno.
Cometar: Boca.
Comilón / comipini: Sodomita.
Comisión: Soborno.
Compadrada: Bravuconada, acción propia de un compadre o compadrito.
Compadraje: Grupo de compadres
Compadre (adj.): Bonito, coqueto
Compadrear: Baladronear, alardear.
Compadrito: Valentón, fanfarrón.
Compadrón: Fatuo, presumido
Computadora: Cabeza.
Comunacho /comunardo: Comunista.
Concurdaneo: Colega del ebrio.
Condón: Preservativo.
Coneja, correr la: Indigencia.
Conejo: Asistente social de la cárcel.
Confite: Balazo.
Conga: Fiesta.
Conserva: Conservador.
Consulín /consultorro: Consultorio.
Consumisión: Consumo.
Contreras: Opositor.
Conventillo: Casa de inquilinos. Casa de vecindad de aspecto pobre y de muchas habitaciones
Conversa, la: Conversación.
Convoy: Casa de inquilinato.
Copar: Afrontar.
Copetudo: Adinerado.
Copo: Hacerse cargo del riesgo y la responsabilidad consiguiente.
Coquitos: Testículos.
Corajeando: Audazmente, valientemente.
Corajudo: Valiente.
Corcho: Pancista.
Cornelio: Cornudo.
Corneta: Alcahuete.
Corno, un: Nada, no importar / Ignorar adrede.
Coroniya: Cabeza.
Corpíño: Sostén.
Corrido: Baquiano.
Corso: Locura.
Cortada: Calle
Cortado: Indigente.
Cortarse: Retirarse, apartarse.
Corte, darse: Aspaviento.
Cortina /corto: De baja estatura.
Coso: Tipo, individuo
Costiya: Mujer.
Coté / cotele / cotén: Costado, lado.
Cotín, el: Cama.
Cotizarse: Pago o prorrateo.
Cotorrear: Chismear.
Cotorro: Cuarto pobre
Cráneo: Cabeza / Inteligencia.
Crema: Refinados, poderosos.
Crepar: Morir
Crepó: Murió.
Croqueta: Cabeza.
Crosta: Chambón / Vago.
Croto: Vago.
Crudo: Chambón, torpe.
Cuadrado: Ignorante.
Cuartelada / cuartelazo: Rebelión militar.
Cucha / cucheta: Cama.
Cucusa: Cabeza.
Cuerear: Chismear.
Cuerito: Dinero.
Cuero: Billetera, cartera.
Cuete, al: Inútilmente.
Cuete: Balazo.
Cufa: Cárcel.
Culastro: Sodomita.
Culata: Bolsillo trasero del pantalón.
Culo: Suerte / Infortunio.
Cuña: Influencia / Pene
Cuore: Corazón
Cúpula: Cabeza.
Curado: Ebrio
Curda (Español): Borrachera
Curdela: Borracho / Borrachera.
Curdelín / curdelún: Borracho.
Currar: Estafar
Curro: Estafa, fraude.
Cusifai: Tipo innominado
LETRA D

Dandy: Correctos y buenos mozos
Dante: Bujarrón, pederasta activo.
Dar dique: Engañar con falsas apariencias.
Darique: Invercion silabica de querida
Dátiles: Dedos de las manos o pies.
Debute: Excelente.
Deca: Decadencia.
Dechavar: Delatar.
Dedo: Alcahuete.
Degoyar: Estafar, defraudar.
Delantero: Senos.
Depa /Derpa: Departamento, generalmente, de soltero.
Dequera: Alerta, atención.
De queruza: Alerta, atención.
Desabrochado: Despreocupado.
Desafrecharse: Fornicar.
Desbolado: Desordenado.
Desbolar: Alborotar, desordenar.
Desbole: Desorden, lío.
Desbrujulado: Desorientado.
Descangayado: Achacoso, deteriorado.
Descarnada: Muerte, la.
Deschavar: Delatar, confesar.
Deschave: Confesión. Apertura de una cerradura o cerrojo.
Descolado: Deteriorado, achacoso.
Desconche: Desorden, lío.
Desconectado: Despreocupado.
Descuerear: Chismear.
Descuidista: Ladrón que aprovecha el descuido de sus víctimas.
Desechar: Eliminar
Desenchufado: Despreocupado.
Desgrilar: Robar.
Deshilachado: Deprimido.
Desiderio: Decidido.
Desinflarse: Asustarse.
Desmayarse: Dormir.
Despachar: Matar.
Despe: Desorden, lío.
Despegado: Despreocupado.
Despelotado: Desordenado.
Despelotar: Desordenar.
Despelote: Desorden, lío.
Despiolado: Desordenado.
Despiole /despiporre: Desorden, lío.
Desprendido: Despreocupado, indiferente.
Desquicio: Desorden, lío.
Desteñir: Traicionar informalmente.
Dichero: Cobista
Dientudo: Piano
Dilatar: Confusión, desorden.
Dinenti: Cantillos (Juego de niños).
Dique: Presunción, vanidad
Diquear: Alardear.
Diqueo: Aspaviento.
Disquero: Se dice del Fanfarrón y de cuanto sirve para fanfarronear
Dolorosa: Factura de gastos, generalmente, del restaurante.
Dona: Mujer.
Dopado: Drogado.
Dragoneante: Cortejante.
Dragonear: Enamorar, cortejar.
Dragoneo: Galanteo.
Drogui: Bebida alcohólica.
Droguista: Borracho.
Durañona: Chambóm.
Durazno: Chambón.
Duro: Chambón.

LETRA E

Elemento: Mujer.
Embagayar: Embrollar.
Embalado: Predispuesto.
Embalurdado: Embrollado, engañado, engañar, embaucar.
Embarrado: Desprestigiado.
Embarrar: Denigrar.
Embetunar: Sobornar.
Emblecar: Denigrar, difamar.
Embolar: Desordenar.
Embolsicar: Ahorrar mezquinando.
Embretado: Encerrados.
Embrocado: Conocido.
Embrocantes: Prismáticos
Embrocar: Mirar, fijar la vista.
Embroncarse: Enojarse.
Embroque: Mirada.
Empacador: Tacaño
Empacar: Ahorrar
Empalmadores: Cierto tipo de escamoteadores de naipes u objetos.
Empapelar: Sobornar.
Empaquetado: Embrollado.
Empaquetar: Embrollar / Ahorrar mezquinando.
Empavonada: Pistola.
Empedado: Borracho.
Empedarse: Embriagarse.
Empelotado: Confundido.
Empiedrada: Brillantes.
Empilchado: Vestido.
Empilchar: Emperifollarse.
Empilche: Traje, ropa
Empinado: Ebrio.
Empinarse: Embriagarse.
Emputecer: Indisponerse, enojarse.
Enacarajinar: Complicar.
Enajar: Irse, alejarse.
Enaje: Huída, escape.
Encajado: Endeudado.
Encajar: Enjaretar.
Encajetado: Enamorado apasionadamente.
Encamotarse: Enamorarse apasionadamente.
Encanado: Apresado.
Encanar: Apresar, arrestar.
Encanastado: Preso.
Encanastar: Apresar.
Encanutar: Guardar algo en un canuto, encerrar.
Encarador: Valiente, decidido.
Enchastrar: Denigrar.
Enchastre: Desprestigio.
Enchinchado: Enojado.
Enchincharse: Enojarse.
Enchufado: Apresado / Preocupado, enojado.
Enchufar: Apresar / Acertar / Enjaretar.
Enchufarse: Irritarse.
Enchufe: Predisposición, preocupación / Influencia.
Encocorarse: Rebelarse.
Enconchado: Enamorado apasionadamente.
Encopado: Ebrio.
Encoparse: Embriagarse.
Encopetinada: Ebrio.
Encordada: Guitarra.
Encornada: Guitarra.
Encufar: Apresar.
Enculado: Enojado.
Encurdan: Embriagan.
Encurdarse: Embriagarse.
Encurdelan: Embriagan.
Encurdelarse: Embriagarse
Enfardar: Ahorrar, mezquinar.
Enfarolado: Ebrio. También significa adornado, decorado.
Enfocar: Observar, mirar.
Enfriado: Muerto.
Enfriar: Matar.
Enfundar: Callar.
Engarfiar: Atrapar.
Engayolado: Preso.
Engrampar: Atrapar, asir.
Engranarse: Enojarse.
Engrane: Enojo.
Engrasado: Sobornado.
Engriyado: Apresado.
Engrupichir: Engañar, engrupir.
Engrupido: Vanidoso, fatuo.
Engrupimiento: Engreírse
Engrupir: Engañar
Enguantado: Apresado.
Enguiyarse: Prosperar, enriquecerse.
Enjaular: Apresar.
Enjetado: Enojado.
Enjetarse: Enojarse.
Enquilombado: Desordenado, confundido.
Enquilombar: Desordenar.
Enroscar: Embrollar, engañar.
Ensartar: Engatusar
Ensartarse: Errar, fracasar.
Ensartenar: Apresar.
Ensillar: Comenzar
Ensiyarse: Enojarse.
Ensobrado: Acostado / Apresado.
Ensobrar: Apresar.
Ensombrar: Apresar.
Ensuciar: Denigrar, difamar.
Entrador: Decidido, audaz.
Entrancado: Ebrio.
Entrancarse: Embriagarse.
Entrañudo: Resoluto, valiente.
Entregador: Alcahuete.
Entregar: Delatar.
Entrevero: Desorden, lío.
Entripao: Amargura, intimidad
Entrompado: Enojado.
Entromparse: Enojarse.
Entubado: Vestido, trajeado.
Envainar: Clavar
Envinado: Ebrio.
Envinarse: Embriagarse.
Enyante: Comida.
Enyetar: Agorar, dar mala suerte.
Enyugar: Encarcelar.
Esbornia: Borrachera.
Escabiado: Borracho.
Escabiar: Beber, tomar bebida alcohólica.
Escamoteador: Delincuente que opera por escamoteo, por rápido y hábil ocultamiento de lo robado.
Escarbadientes: Arma blanca.
Escarpiantes: Zapatos.
Escarpios: Zapatos.
Escasany: Indigente, pobre.
Escashato: Achacoso.
Escaso: De baja estatura.
Escoba: Guitarra.
Escobero: Guitarrista.
Escolasar: Jugar por dinero.
Escolaseador: Jugador por dinero, timbero.
Escolasiarse: jugarse, entregarse
Escombrero: Ostentoso.
Escombro: Ostentación.
Escoñado: Achacoso, deteriorado. Zurrado.
Escoñar: Zurrar.
Escorchador: Latoso, pesado.
Escorchar: Fastidiar, molestar.
Escrachado: Zurrado.
Escrachamiento: Reconocimiento, escudriñamiento.
Escrachar: acción de poner en evidencia.
Escracho: Cara / Mujer fea.
Escruchante: Delincuente
Escruche: Robo.
Escrushar: Robar mediante llaves o elementos
Escrushe: Robo con violencia.
Escupir: Delatar.
Escurrirse: Despabilarse.
Esguifuso: Asqueroso, repugnante
Esgunfiado: Fastidiado.
Esgunfiar: Fastidiar.
Espamento: Aspaviento.
Espamentoso: Ostentoso
Esparo: Colaborador del punguista distrayendo la vista
Espárragos: Dedos.
Espiantar: Quitar
Espiantarse: Irse, huir.
Espiante: Escape, huida, partida, retirada
Espiche: Charla / Muerte.
Espinchar: Morir.
Espirajusar: Irse, huir.
Espirajuse: Escape, huida.
Espirar: Despedir.
Espirarse: Irse, alejarse.
Espiro: Escape, huida.
Espor: Ganancia, sport, dividendo turfístico.
Esputza: Tufo, hedor.
Esquenún: Vago.
Esquifuso: Raído, sucio.
Esquillo: Rabieta.
Esquina: Experiencia.
Esquinazo: Abandono
Esquiyo: Berrinche, enojo
Estancia: Cortujo
Estaño: Mostrador de boliches y bares
Estarado: Apresado.
Estaribel: Cárcel.
Estaro: Cárcel.
Estaso: Tonto.
Esteca: Parte de robo.
Esteta: Invertido.
Estofado: Hecho, asunto dudoso.
Estrilado: Enojado.
Estrilar: Enojarse.
Estrilento: Enojado.
Estrilo: Enojo, rabieta
Estrolada: Zurra, paliza.
Estrolar: Zurrar.
Estrole: Zurra, paliza.
Estufado: Fastidiado.
Estufar: Fastidiar.
Excómunica: infortunio reiterado.

LETRA F

Faca: Arma blanca.
Facha: Rostro, cara.
Fachada: Cara.
Fachatosta: Desfachatado.
Facheta / fachenda: Cara.
Fachinero: Valiente, resoluto.
Facón (Español): Cuchillo
Fajada: Paliza.
Fajado: Drogado
Fajar: Castigar
Fajarse: Drogarse.
Falocracia: Supremacía del hombre.
Falócrata: Partidario de la falocracia.
Falopa: Droga / cosa de poca calidad
Falopero: Drogadicto.
Falopiarse: Drogarse.
Faltazo: Informalidad, falta a una cita o compromiso.
Fame: Hambre, apetito.
Fana: Fanático.
Fanar: Robar.
Fane (Francés): Marchita
Fane: Desgastado, venido a menos
Fanega: Tonto.
Fanfa: Ostentoso (Fanfarrón).
Fangos / fangushes: Zapatos.
Fangote: Mucho, en cantidad.
Fanguyos: Zapatos.
Faninte: Holgazán.
Farabute / i: Ostentoso, fanfarron
Fariñera: Arma blanca de grandes dimensiones.
Faroles: Ojos.
Farra: Juerga
Farrear: Divertirse / Mofarse.
Farrista: Juerguista.
Faseando: Fumando.
Fasear: Fumar.
Fasería: Cigarrería.
Faso: Cigarrillos
Fastrás: Puñetazo.
Fasules: Dinero (Pesos).
Fatigante: Trabajador.
Fatigar: Trabajar esforzadamente. Andar, caminar.
Fato: Asunto, cuestión, "movida"
Fayada: Yerro, fracaso.
Fayar: Fracasar
Fayuta: Falsa
Fayutear: Engañar.
Fayuto o falluto: Desleal, falso o falsificador / Ordinario, mala calidad.
Feba: Mujer.
Feca: Café
Feites. Tajos en la cara, cortadas, charrasquinadas
Felpa: Zurra.
Felpeada: Zurra, reprimenda.
Felpear: Zurrar / Reprender.
Felpudo: Obsecuente.
Fémina: Mujer.
Fenómeno: Obsecuente.
Fesa: Tonto.
Festichola: Fiesta.
Fetén: Excelente.
Fiaca: Pereza, holganza.
Fiacún: Haragán, Indolente.
Fiambre: Muerte.
Fiambrería: Cementerio.
Fica: Crica.
Fichar: Observar detenidamente.
Fideos: Cabellos.
Fierrazo: Coito.
Fierrito: Temor.
Fierro: Arma blanca.
Fifar: Fornicar.
Fifí: Galante
Filado: Embrollado.
Filar: Embaucar / Observar detenidamente.
Filo: Estafa, fraude. Noviazgo. Novio, festejante
Filtrado: Achacoso.
Fingar: Errar, fracasar.
Finir: Morir.
Fiolo: Proxeneta.
Firulete: Adorno, mudanza exagerada en un bailarín.
Firulo: Prostíbulo
Fiyingo: Arma blanca.
Flaca, la: Muerte.
Fletar: Echar, despedir.
Florearse: Alardear, lucirse.
Floreo: Alarde, aspaviento. Además significa aumento o disminución del grabado del revés del naipe.
Flotador: Pancista.
Forfait: Falto de alguna cosa, dinero, salud, etc.
Formador: El que paga.
Formar: Pagar.
Formativo: baile en donde los bailarines debían pagar derecho de piso.
Formayo: Muerte.
Forrado: Adinerado.
Forrarse: Progresar.
Forro: Ataúd, preservativo.
Fortacho: Fuerte, vigoroso.
Fosforera: Cabeza.
Fragote: Rebelión militar.
Fragotero: Militar adepto a los golpes de Estado.
Franela: Manoseo sexual.
Franelear: Roce amoroso.
Franelero: El que pasa el tiempo en una casa de tolerancia sin hacer uso de ninguna mujer.
Frangoyo: Asunto turbio, dudoso.
Fratachar / fregar: Roce amoroso.
Fresquete: Frío.
Frilán: Tonto.
Frilo: Tonto.
Frío: Vanidad.
Fruncido: Engreído.
Fruncirse: Engreírse, asustarse
Fuelle: bandoneón
Fueyero: Bandoneonísta.
Fueyista: Bandoneonísta.
Fula: Mujer sin atractivos.
Fulana: Mujer innominada.
Fule: Ordinario, mala calidad.
Fulera: Fea
Fulería: Indigencia, ordinario, mala calidad / Deslealtad, viveza.
Fulerín: Fulero, malo, feo.
Fulminante: Fósforo.
Fúlmine: Aciago, de mala suerte.
Fulo: Enojado.
Fumante: Cigarrillo.
Fumista: Charlatán.
Funcar: Fornicar / Funcionar.
Funche: Sombrero
Funda: Preservativo.
Fundas: Medias.
Fundido: Achacoso, indigente.
Funshe: Sombrero.
Funyi:Sombrero
Furbante: Informal, tramposo.
Furbo: Informal, tramposo, de mala entraña.
Furca: Acción de distraer a un persona para que la otra la ataque de una manera determinada y quede inmóvil.
Fusilado: Deprimido.


LETRA G

Gabion: Pretendiente, amante
Gacho: Sombrero masculino flexible cuya ala se inclina hacia abajo.
Gagá: viejo, arruinado, debilitado mentalmente.
Gaita: Gallego
Galerudo: Refinado.
Galguear: Sentir apetito de algo
Galgueo: Indigencia.
Galleteao: Rechazado o desairado por una mujer.
Galo: Trozo.
Gaman: Manga.
Gambas: Piernas.
Gambeta: Informalidad.
Gambetear: Esquivar
Gancho, tener: Atracción / prestigio.
Ganchos: Dedos.
Gansada: Tontería.
Garaba, Garabita: Muchacha
Garabito: Vago. Muchachito
Garbía: Llovizna.
Garca: Tramposo, estafador
Garcador / garcaíno: Informal, tramposo.
Garchar: Fornicar.
Garfiña: Robo.
Garfiñar: Robar.
Garfios: los dedos del punguista (ladrón)
Garpar: pagar dinero o algunas cuentas de amor
Garqueta: Informal, tramposo.
Garrón, de: Gratuitamente.
Garrón: gratuito.
Garronear: vivir a costa ajena.
Garronero: Gorrón
Garúa: Llovizna.
Garuar: Lloviznar.
Garufa: Diversión, fiesta. Muchacho divertido
Garufear: Divertirse.
Garufero: Juerguista.
Garuga: Llovizna.
Gasolero: Económico, tacaño.
Gastar: Mofarse.
Gatiyar: Pagar.
Gato: Indigente, pobre.
Gavilán: Picaflor, seductor.
Gavión: Burlador que seduce a las mujeres
Gay: Invertido.
Gayeta, colgar la: Despido.
Gayeta: Desaire o rechazo de la mujer al que requiere su mano
Gayetear: Echar, despedir.
Gayina: Cobarde.
Gayinero: Popular.
Gayola: Cárcel
Ghirante: Yirante, propio de las mujeres de vida aireada.
Gigoló: Rufián.
Gil: Tonto
Gilada: Grupo de tontos.
Gilardo / gilastro / gilastrúm: Tonto.
Gilería: Grupo de tontos.
Gilí: Corrido, astuto, experimentado.
Giliberto: Tonto.
Gilimursi: Tonto.
Gilún / gilurdo: Tonto.
Globear: Mentir.
Globo: Mentira.
Golpista: Militar y adepto al golpe militar.
Goma: Preservativo.
Gomera: Tirador.
Gomía: Forma vérsica de amigo.
Gorda, se armó la: Enojo.
Gorila: Fascista.
Gorra, de: Gratuitamente.
Gorrión: Gorronero.
Gozar: Mofarse.
Grajera: Atorrante distinguido, favorecido por los señores y familias.
Granfiñar: Robar.
Grasa: Obrero, mersa
Graserío: Cáfila, grupo mersa.
Grasienta: Billetera.
Grasún: Ordinario, rústico.
Grata: Ladrón.
Gratarola: Gratuitamente.
Grela: mujer de medio ambiente. Mugre. Suciedad.
Grillero: Ladrón que sustrae desde el grillo.
Grillo: Bolsillo lateral del pantalón.
Grilo: Cartera
Groncho: Ordinario, rústico.
Grúa: Levanta juego clandestino / Ramera
Grupos: Cuentos, mentiras
Gruyera: Billetera.
Gruyos: Pesos, dinero.
Guacho: Huerfano.
Guadaña, la: Muerte.
Guadañar: Atrapar, ganar, asir, agarrar.
Guapeada: Guapeza.
Guapeando: Valientemente.
Guapear: Afrontar
Guapo (Español): Valiente
Guarangada / guaranguería: Grosería.
Guarango: Grosero, ordinario.
Guarda, a la: Mucho, en cantidad.
Guarda: Atención!
Guardabarros: Orejas.
Guardado: Apresado.
Guardar: Apresar.
Guasada: Grosería.
Guaso: Grosero.
Guay: Estafa, fraude.
Güevear: Tontear.
Güevón: Tonto.
Güevudo: Indolente.
Guía: Acomodo tramposo de una carta del mazo como referencia.
Guillar: Cosechar, hacer ganancia
Guinchero: Levanta juego.
Guiñe: Infortunio.
Guiso: Tonto
Guita: Dinero
Guitarreada / guitarreo: Charlatanería.
Guitarrear: Improvisar con desconocimiento total.
Guitarrero: Charlatán / Guitarrista.
Guiya: Estafa, fraude.
Guiyado: Adinerado.
Guiyar: Estafar, defraudar.
Guiye: Fraude / Locura.
Gurda: Excelencia, gran calidad
Gurí: Chiquillo.
Gurrumín: Chiquillo, pequeño.



La mayor colección de relatos, frases y hechos históricos increíbles,
pero absolutamente verídicos, de un país “condenado al éxito” .
Investigación y recopilación: Abel Cortese







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"He procurado diligentemente no reírme de las acciones humanas,
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DICCIONARIO DEL
LUNFARDO ARGENTINO
LETRAS H- I- J- K-L





DICCIONARIO DEL LUNFARDO ARGENTINO LETRAS H- I- J- K- L

LETRA H

Hacer Sapo: Fracasar
Hacer: Robar.
Hamacarse: Trabajar esforzadamente.
Hecho: Ebrio.
Hembra: Mujer, concubina.
Hembraje: Grupo de mujeres.
Hideputa: Vástago de ramera.
Hijoputez / hijoputada: Deslealtad, vileza.
Hilo: Teléfono.
Hincha: Fanático de una divisa o institución.
Hinchabolas: Cargoso.
Hinchado: Fastidiado.
Hinchaguindas: Fastidioso.
Hinchapelotas: Fastidioso.
Hinchar: Fastidiar.
Hinchún: Fastidioso.
Hocicar: Flaquear
Hocicar: Fracasar / Errar.
Hojaldra, de: Gratuito.
Homo: Invertido.
Honda: Tirador.
Horizontal: Cama.
Hornaya: Nariz.
Huesuda: Muerte.
Huevos: Testículos.
Húmedo: Ebrio.
Humo, se hizo: Escape, huída.
Humo: Engreimiento.

LETRA I

I.B.M.: Cabeza.
Imbancable: Insoportable.
Impermeable: Preservativo.
Incendiar / incinerar: Denigrar.
Indiada: Pandilla.
Infante: Peatón.
Inflado: Engreído / Fastidiado.
Inflar: Hastiar, fastidiar.
Inflarse: Engreírse.
Invernizzio: Sobretodo
Isa: Atención.


LETRA J

Jabón: Miedo, susto
Jabonearse: Asustarse.
Jacobo: Hebreo, judío
Jai: Lechuguino, petimetre, abreviatura de jaileife.
Jailaife: Petimetre
Jamar: Mirar fijamente.
Jamón: Violín.
Jarangón: Fiesta.
Jaula: Vivienda de soltero / bandoneón / cárcel.
Jeringa: Fastidioso, cargoso / Rijoso.
Jeta, de: Gratuitamente.
Jeta: Cara, rostro.
Jetatore: Infortunio, influencia maléfica.
Jeteador: Gorronero.
Jetear: Gorronear.
Jetón: Cara grande. Persona de cara grande y rasgos pronunciados.
Jetudo: Cara grande / enojado.
Jilguero: Tonto.
Jiquero: Delincuente que opera por medio de jicas, a distancia.
Jirafa: Linterna.
Joda: Broma, mofa / Fiesta.
Joder: Divertirse. Bromear, mofarse. Perjudicarse
Joderse: Perjudicarse.
Jodido: Achacoso, deteriorado / Maligno.
Jodón: Burlón.
Jonca: Ataúd
Jovato. Viejo
Jugado: Achacoso.
Jugarse: Arrojarse, intervenir.
Juiciosa, la: Cárcel.
Julepe: Susto
Julepeado: Asustado.
Julepearse: Asustarse.
Junado: Conocido.
Junar: Mirar
Junta: Yunta
Juntapuchos: Vago.
Justa, la: Exacto.
Justiniano: Escaso, limitado, justo


LETRA K

Kaput: Acto final, terminación
Kilo, está un: Excelente.
Kilombificar: Alborotar, complicar.
Kilombo: Prostíbulo. Desorden, lío.
Kinotos: Testículos.
Kukay: Avecilla. Semejante al tordo

LETRA L

La casa del pueblo: Cementerio.
La Pesada: Sector del delito que agrupa a los pistoleros.
Labia: Facilidad para dialogar.
Laburador / laburante: Trabajador.
Laburar: Trabajar
Laburo: Trabajo.
Ladeado: Enojado.
Ladero: Compañía.
Ladiya: Fastidioso.
Ladrillo: Ladrón.
Laícero / lápiz: Levanta juego (clandestino).
Lambeculos: Obsecuente.
Lampar: Dar / pegar.
Lance: Acción que se ejecuta sin seguridad de éxito
Lancear: Robar.
Lancero: Ladrón (opera con dos dedos) / Galanteador.
Lancero: ladrón, ratero
Lánguido: Indigente / pobre.
Lapicero: pasador clandestino de apuestas.
Largar: Delatar / Despedir, echar.
Largavistas: Prismáticos.
Largo: Alto.
Lastrar: Comer.
Lastre: Comida.
Lata: Ficha metálica por la que la pupila canjeaba a la madame el dinero recibido por el cliente.
Latería: Relojería, joyería.
Lavandero: Abogado.
Leche: Suerte.
Lechera: En el juego de las bolitas, la predilecta del jugador, por lo común es blanca.
Lechero / a: Afortunado.
Lechero: Billetera, cartera.
Lechusear: Agorar, dar mala suerte.
Lechuza: Agorero, tipo de mal agüero.
Leña / leñada: Zurra, paliza.
Leñar: Zurrar.
Lengo: Pañuelo de uso masculino.
Lenguaraz: Tipo que practica el cunnilinguo.
Lengue (italiano): Pañuelo
Lentazo / lente: Ojeada.
Lentear: Observar.
Leona: Beldad
Leonera: Depósito de detenidos
Leones: Pantalones
Levantar: Conquistar / Pagar / Reprender.
Levante: Reprimenda / Conquista amorosa.
Libreto: Texto, cosa estudiada
Liebre, correr la: Padecer de hambre
Liendre: Astuto, despabilado.
Lienzos: Pantalones.
Liga: Suerte / Agarra, atrapa.
Ligador: Afortunado.
Ligar: Recibir castigo.
Limones: Senos.
Limosnero: Ladrón de alcancías de iglesias.
Limpiar: Matar, asesinar / Robar.
Limpio: Indigente. Libre de cuentas pendientes con la Justicia.
Linusa: Pereza.
Linuso: Perezoso.
Linyera: Vagabundo / Enseres del linyera.
Liquidado: Asesinado.
Liquidar: Asesinar.
Lisa: Flaca, descarnada.
Liso: Proxeneta.
Listo: Achacoso.
Llantas: Zapatos.
Llenar: Fastidiar.
Llenarse: Malhumorarse.
Lleno: Malhumorado.
Llorón: Violín.
Locatelli: Loco.
Lofiar: Estafar.
Logi: Gil
Lola, no querer: Despreocuparse.
Lompas: Pantalones.
Lonyi: Tonto.
Lonyipietro: Tonto.
Lora: Mujer de costumbres livianas.
Lorenzo: Mujer sin atractivos.
Loro: Mujer sin atractivos.
Luca: Billete de mil pesos
Lufanía: La musa lunfa.
Lunfa: Lunfardo.
Lunfamanía: Costumbre de hablar en lunfa.
Lunfapoesía: Poética lunfa.
Lunfardesco: Relacionado con el lunfa.
Lunfardía: Mundo del lunfa.
Lunfardo: Ladrón, maleante.
Lunfardología: Inventario del lunfa.
Lunfaverseante: Poeta lunfa.
Lunfo/ a: Alto.
Lurpiar: Defraudar, estafar.

LETRA M

Macana: Locura, mentira, estupidez
Macanazo: Mentira.
Macanear: Mentir.
Macanudo: Excelente.
Maceta: Torpe
Macharse: Embriagarse.
Machete: ayuda memoria.
Macró: Alcahuete que prostituye mujeres
Madama: Regente de prostíbulo.
Madrugado: Anticipado.
Magallanes: Tonto
Malandra / malandraca: Delincuente. Mal viviente en general.
Malandrinaje: Delincuencia en general.
Malandrino: Delincuente.
Malanfear: Comer / Defraudar, estafar.
Malanfiar. Comer
Malanfio: Asunto, hecho dudoso.
Malario: Infortunio.
Malerba: Ordinaria.
Maleta: Torpe, falto de habilidad y destreza.
Maletro: Se le llama al ladrón de equipaje
Malevaje: Maleantes.
Malevo: Peleador
Mamadero: Bar, despacho de bebidas alcohólicas.
Mamado: Ebrio.
Mamao: Borracho
Mamarse: Embriagarse.
Mamchimbre / macho: Concubino.
Mamerto: Torpe.
Mamón: Ebrio.
Mamúa: Ebriedad.
Mancada: Yerro.
Mancado: Conocido.
Mancar: Entender, comprender.
Mancar: Fracasar en un robo al ser descubierto el ladrón
Mancarrón: Achacoso, viejo.
Mancusado: Conocido.
Mancusar: Conocer.
Mandamás: Autoridad, patrón, jefe.
Manduque: Comida.
Manflora / o: Invertido.
Manflorita: Invertido.
Manga: Sablazo / Mucho, gran cantidad.
Mangador: Sablista, pedigüeño.
Mangagases: Dinero, pesos.
Manganeta: Treta, engaño
Mangante: Pedigüeño, sablista.
Mangar: Sablear.
Mangazo: Sablazo
Mangos: Pesos
Mangruyos: Dinero, pesos.
Manguear: Sablear. Pedir dinero.
Manguero: Sablista.
Manguiyos: Dinero.
Manija: Influencia, poder.
Manijear: Impulsar, influenciar.
Manú: Tonto.
Manyacaña: Borracho.
Manyado: Conocido.
Manyamiento: Reconocimiento policial.
Manyaoreja: Obsecuente.
Manyapapeles: Abogado.
Manyar: Comer. Darse cuenta
Manyín: Ebrio, consuetudinario.
Máquina: Beldad.
Maranfio: Asunto, hecho dudoso.
Marcha atrás: Invertido, gay.
Marchanta: Arrebatiña
Marciano: Idiota.
Marengos: Dinero, pesos.
María muñeca: Masturbación.
Mariano: Valiente.
Marimba: Zurra, paliza.
Marinante / maringote: Marinero.
Mariposón: Afeminado / Galanteador, enamoradizo, voluble.
Marmote: Torpe
Maroma: Situación de riesgo, suscitarse
Marote: Cabeza.
Marquillado: Se dice del naipe preparado de cierto modo tramposo.
Marroca: Cadena del reloj
Marroco: Pan
Marronazo: Puñetazo.
Marroquero: Tacaño.
Marrusa / marusa: Zurra, paliza, golpes.
Martona: Suerte / Senos.
Marusa: Golpiza
Masacrar: Matar, asesinar.
Masacre: Asesinato.
Masoca: Masoquista o pesimista.
Masoquearse: Castigarse.
Matadero: Albergue transitorio.
Matambre: Muerto.
Matasanos: Médico.
Mate: Cabeza
Matete: Desorden, lío.
Matina: Mañana, primera mitad del día.
Matonear: Intimidar.
Matoneo: Intimidación.
Matrero: Fugitivo
Matrimoniado: Casado.
Matrimoniarse: Casarse
Matufia: Embrollo con propósito de fraude
Matufiero: Informal, tramposo.
Matungo: Caballo viejo, achacoso, inútil.
Maturrango: Caballo viejo, achacoso, inútil.
Maula (Español): Cobarde
Mayorengo: Oficial mayor (policía), comisario.
Mechera: Ladrona en tiendas.
Mejicaneada: robo o atraco a contrabandistas u otros delincuentes apropiándose de su motín.
Melenudo: Pelilargo, desgreñado.
Melón: Cabeza.
Melonazo: Tonto.
Menega: Dinero
Meneguina: Dinero.
Menesunda: Droga / Desorden, lío.
Menta: Fama, voz u opinión acerca de un persona.
Meódromo: Retrete.
Merengue: Afeminado / Desorden, lío.
Meresunda: Droga.
Merlín / merlo / merluza: Tonto.
Merluza: Borrachera
Mersa: Conjunto de personas de baja condición
Mersada: Cáfila, grupo mersa.
Mersún: Ordinario, rústico.
Merza: Peña
Mestizo: Piano
Metejón: Cariño, pasión, amor
Metejonearse / meterse: Enamoramiento.
Meterse: Encariñarse
Metido /a: Enamorado apasionadamente.
Metido: Endeudado.
Milanesa: Mentira.
Milanesero: Mentiroso.
Millonaria: Sífilis.
Milonga: Cabaret, baile, festín
Milongón: Fiesta bailable.
Milonguera: Joven cabaretera
Milonguita: Mujer de vida aireada
Mina: Mujer
Minaje: Grupo de mujeres.
Miñango: Trozo.
Minerío: Grupo de mujeres.
Minerva: Mujer.
Minga: Nada, no.
Mino: Invertido.
Minola / minón / minusa: Mujer.
Miqueta: Puñetazo.
Mirantes / mirones: Ojos.
Mirón: Ojos.
Mishe: Hombre maduro que paga generosamente favores de mujeres
Mishiadura: Indigencia, miseria, pobreza
Mishio: Indigente.
Mistificador: Farsante, simulador.
Mistificar: Defraudar, estafar.
Misto: Cándido.
Mistonga: pobreza
Mistongo: Humilde, insignificante
Mistonguelaje: Conjunto de gente, cosas o sucesos mistongos, pobres o humildes.
Mistonguería: Indigencia.
Mita y mita: Por mitades.
Miti y miti: Por mitades.
Mixto: Pederasta, ambidiestro.
Mojar: Atrapar, agarrar. Fornicar
Molde, en el: Quieto.
Mondonguera: Estómago.
Mongo Aurelio: Incredulidad. Personajes inexistentes utilizados en el lenguaje popular.
Mono: Enseres del linyera en un atado.
Monseñor: Herramienta para violar cerraduras.
Montonera: Mucho, en cantidad.
Montoto: Personaje inexistente utilizado en el lenguaje popular.
Mopio: Tonto.
Morder: Cohechar.
Mordida: Cohecho.
Morena: Pistola
Morfar: Comer
Morfeta: Hermafrodita, invertido.
Morfetear: Comer.
Morfi: Comida.
Morfilar: Comer
Morlaco: peso
Morlacos: Dinero
Mormoso: Magullado.
Morocha: Pistola.
Morocho: Teléfono.
Morondanga: Nadería.
Mortadela: Muerto.
Mosaico: Moza, mujer.
Mosca, quedarse: Impasible, quieto.
Mosca: Dinero.
Moscarda: Dinero.
Moscón: Fastidioso.
Mosqueta: Dinero.
Mostaza: Enojo.
Mostrador: Senos / Experiencia.
Movida: Reprimenda.
Mueble: Albergue transitorio / Mujer.
Muerto: Facturación de gastos
Mufa: Mal humor, fastidio, ánimo decaído, mala suerte.
Mufarse: Aburrirse, malhumorarse.
Mujerage: Grupo de mujeres.
Mujica: Mujer.
Mula: Estafa, fraude.
Mulero: Fullero, tramposo.
Muñeca: Experiencia, habilidad.
Muñequear: Influenciar.
Murga: Comparsa que actúa en los carnavales con diversos instrumentos y vistosos trajes.
Mus: Silencio.
Musa: Mentira.
Música: Cartera, billetera / Dinero.
Musicante: Músicos.
Musiqueros: Músicos.
Muzarela: Silencio.

LETRA N

N.P. (No place): Perdedor, sin figurar
Nacarado: Bandoneón.
Nadadora: Flaca, descarnada.
Naifa: Jovencita, mujer
Naife: Arma blanca.
Najar: Irse / echar / despedir.
Najusar: Echar / despedir / irse / observar.
Napia: Nariz.
Napiún: Narigón.
Naranja: Nada.
Narigada / narigazo: Porción de droga.
Narigueta: Narigón.
Nariguetearse: Drogarse.
Naso: Nariz.
Nasún: Narigón.
Navo: Persona de poco valor.
Negraje: Cáfila, mersa.
Neura: Neurastenia.
Nísperos: Pies
Nuria: Voz infrecuente de significado incierto

LETRA Ñ

Ñaupa: Antiguo,del tiempo del ñaupa.
Ñapar: Atrapar, agarrar.
Ñata, la: Muerte.
Ñata: Nariz.
Ñato: Tipo innominado.
Ñudo, al: Inútilmente.

LETRA O

Oblar: Pegar.
Ojete: Suerte.
Ojetudo: Afortunado.
Ojito, de: Gratuitamente.
Olfa: Obsecuente / Chupamedias.
Oligarca: Conservador.
Olivetti: Despido
Olivo, dar el: Despedir, Echar.
Olivo, tomarse el: Irse / Huir.
Olivo: Despedirse
Opa: Idiota.
Opiarse: Malhumorarse.
Opio, dar el: Despido.
Opio: Malhumor.
Orejear: Adular.
Orejero: Obsecuente.
Orejudo: Conservador.
Oriyero: Arrabalero, de las orillas.
Ortiba: Delator.
Ortibar: Ver, mirar, delatar
Orto, como el: Infortunio.
Orto: Suerte
Ostra: Crica
Otario: Tonto, cándido
Oxidado: Agotado, extenuado.
LETRA P

Paco: Envoltorio, paquete.
Pacoy: Paco, paquete, atado
Paica: Mujer
Palmar: Morir.
Palmera: Ruina
Palpitar: Imaginar
Pamela: Bombín, sombrero hongo.
Pan Dulce: Pavo.
Papa: Información beneficiosa; cosa hermosa, de gran calidad
Papusa: Muy bonita
Paralítico: Automóvil robado, impedido de circular.
Pato: Pobre
Patota: peña, pandilla
Pavadas: tonterías
Pavo: Asentaderas.
Pavura: Miedo
Payana: Juego de habilidad que se practica con huesos de frutas y pequeñas piedras.
Pebeta: Muchacha
Pebete: Niño
Peca: Estafa organizada mediante trampas en juegos de azar.
Pechador: Sablista
Pechar: Pedir, dominar, alcanzar
Pechazo: Pedir prestado.
Pego: Adhesivo.
Peinado: Simulación de corte o cambio de naipes, sin hacerlo.
Pelechar: Progresar
Peleche: Indumentaria
Pelpa: Papel (vesre). Envoltorio que contiene cocaína.
Pequero: Delincuente dedicado a la estafa por medio de trampas en juegos de azar.
Percanta: Mujer. Amante
Percantina: Es la mujer cuando se hace referencia a su punto sexual.
Peringundines: Bailes, salones de barrio
Perro: Torpe, incapaz. Cantor de mala calidad.
Pesebre: Prostíbulo.
Petisa: Llave corta de tipo francés.
Piantao: Loco, demente.
Piantar: Quitar, dejar
Piba: Chiquilla
Pibe: Niño
Pichibirlo: Niño.
Pichicho: Perrito
Pierna: Diestro, experimentado, habil
Pierna: Individuo listo y hábil.
Pifiar: Errar. Dar un golpe en falso con el taco en la bola del billar.
Pilchas: Ropa
Pillado: Engreído
Pingo: Caballo
Pinta (Español): Tipo
Pintusa: Presencia, pinta, aspecto.
Piola: Vivo, despierto, "abusado"
Pirao: Insano.
Pirar: Irse, llevarse.
Pispear: Percibir indirectamente algo con la vista o el oído.
Pituco: niño bien
Poligriyo: Pelagato; hombre pobre y despreciable
Ponchazo: Verdad, reto
Popa: Asentadores.
Posta: Magnifica
Primus: Calentador de mesa a Kerosén.
Prisé: Pulgarada de cocaína.
Prontuario. Record, historia, archivo
Púa: Astuto, sagaz, piola.
Pucho: Colilla
Punga: Ladrón
Pungia: Hurto, perpetrado en el bolsillo de la victima
Pur- sang: Francés, designación de caballo pura sangre.
Purretada: Chiquillada
Purrete: Niño.
Purria minga: Expresión que significa “no se podrá”.
Purriá: Podrá

LETRA Q

Quebracho: Vino.
Queco: Prostíbulo.
Quemado: Desprestigiado.
Quemar: Desprestigiar. Matar con un arma de fuego.
Quemera: Mujer que trabaja en los vaciadores o quemas
Quemo: Desprestigio, descrédito (neologismo)
Queseras: Medias.
Queso: Tonto.
Quía: Tipo innominado.
Quilombear /quilombificar: Alborotar.
Quilombera: Alborotador.
Quilombo, tener: Experiencia.
Quilombo: Prostíbulo, alborotar, perturbar
Quinielero: Levanta juego.
Quinta del ñato: Cementerio.
Quiveve: Prostíbulo.

LETRA R

Rabiosa: Pistola.
Rabona: Ratearse, espantarse.
Radicha / radicheta: Radical.
Rafa: Inverción silábica de farra
Rafiñar: Robar.
Ragú: Hambre.
Raja: Escapar, huir. Correr.
Rajado: Despedido / Echado.
Rajar: Despedir / Echar
Rajar: Huir
Raje, dar el: Despido.
Raje: Escape / Huída.
Rama, en la: Indigencia.
Rana: Vivo, listo
Ranada: Viveza.
Ranchitos: Casitas
Rancho: Sombrero de paja
Ranero: Del barrio de Las ranas
Ranfaña: Raído, sucio.
Ranfañosa: Raído, sucio.
Ranfiña: Robo / Ladrón.
Ranfiñar: Robar.
Rante: Aferesis de atorrante, vago y mal entretenido
Rantería: Indigencia.
Ranterío: Cáfila, grupo mersa.
Rantifusa: Despreciable, vil
Rantifuso: Sucio, despabilado.
Ranun: Aumento de rana, que se dice de la persona astuta y avispada
Rasca / rascabuche: Indigente.
Rascada: Beneficio exiguo, trabajo ocasional.
Rascar: Atrapar.
Rascún: Buscavidas.
Raspa: Reprimenda / Ladrón.
Raspar: Reprender / Robar.
Rasposo: Raído, sucio.
Rastacuero: Ostentoso.
Rata: Novillos / Indigente.
Ratear: Hacer novillos.
Ratero: Novillero / Ladrón.
Rati: Policía de investigaciones.
Raviol: Sobre con cocaína.
Rayado: Enloquecido.
Rayadura: Locura.
Raye: Locura.
Rea: Ramera.
Rebaje de naipe: Trampa que consiste en preparar ciertos naipes con un mínimo rebaje de sus bordes.
Reblán: Achacoso, deteriorado.
Rebusques: Medios de vida
Rechalarse: Es el verbo chalarse “enloquecerse” con el prefijo re
Rechiflar: Enloquecer, predisponer, perturbar
Rechiflarse: Enojarse.
Rechifle: Enojo / Locura.
Rechipe: Chispe, excelente, con prefijo aumentativo
Refalar: Dar, entregar / Robar.
Refilar la vianda: Castigar, golpear.
Refilar un lao: Prepararlo para la trampa por sutil limado de bordes.
Refilar: Dar, entregar.
Refistolear: observar.
Refliar: Dar, entregar
Refundido: Indigente, arruinado
Refundir: Liquidar, arruinar
Regadera: Crica / Cargoso, pesado.
Regalado: Indigente, pobre / Extenuado, vencido..
Registradora: Cabeza.
Rejilla, irse por la: Morir.
Rejuntado: Amancebado.
Relache: Interrupción o ausencia.
Relojeado: Conocido, observado.
Relojear: Observar
Remaba: Trabajaba esforzadamente.
Remanchar: Arruinar.
Remanyao: Percibir, comprender, conocer.
Remanyar: Muy conocido. Conocer muy bien.
Remanye: Perspicacia
Remar: Trabajar esforzadamente.
Remos: Piernas.
Reo: Vagabundo, cachafaz.
Repartija: Reparto de robo.
Repe: En el juego de bolitas, rebote.
Repisas: Senos.
Reprise: Reaparición.
Repuntar: Progresar.
Requintado: Sombrero inclinado o ladeado.
Reseco: Sin dinero
Retacear: Mezquinar.
Retacón: De baja estatura y grueso.
Retambufa: Bujarrón, homosexual activo.
Retobar: Oponer
Retobarse: Revelarse.
Reventador: Violador de cajas de caudales
Reventar al burro: Forzar un caja o un cajón que contiene dinero.
Reventar: Morir violentamente.
Reversible: Pancista.
Revesina: Revés.
Reviente: Acción de reventar. Deterioro o enfermedad.
Revirarse: Enloquecer.
Revire: Locura.
Rifado: Extenuado, Agotado.
Robreca: Inversion silabica de cabrero, enojadizo, enojado
Rolar: Caminar acompañado / Funcionar, andar.
Rolete, a: Mucho, en cantidad.
Rompebolas: Fastidioso.
Rompepeines: Cabeza.
Roña: Enojo.
Roncar: Mandar, ordenar.
Ronga, de: Gratuitamente.
Ropero: Contrabajo.
Rosca, entregar la: Morir,
Rosca: Desorden, pelea / Puñetazo.
Rosquete, entregar el: Morir.
Rostrear: Quedarse dolosamente con el producto de un robo, estafando al cómplice.
Royito: Ayuda memoria.
Royo: Dinero / Charla, discurso.
Rúa: Calle.
Rufino / rufo: Rufián.
Rufino: Cornudo.
Rula: ruleta.
Runfla: Gavilla, pandilla.
Runflero: Pandillero, gavillero.

LETRA S

Sabalaje: Persona de baja condición social
Sábalo: Arrabalero / Hampón orillero / Mal viviente.
Sabandija: Travieso, pícaro.
Sabiola: Cabeza
Sabionda: Cabeza.
Sacar la chala: Obtener dinero
Sacudir: Decir, aclará
Salame: Tonto.
Salamín: Tonto.
Salir picando: Correr.
Salsa: Paliza, zurra.
Sanata: Híbrido oral, galimatías.
Sandía: Cabeza.
Sanguijuela: Rufián.
Santo: Cortafrío.
Saque: Puñetazo, golpe.
Sardo: Sargento.
Sario: Comisario.
Sartenazo: Azar, imprevisto.
Schifrunista: Ladrón que actúa en complicidad con una prostítuta.
Sebón: Haragán, indolente.
Secante: Aburridor.
Secar: Fastidiar.
Secarse: Tronar.
Seco: Indigente, pobre.
Segurola: Seguro, exacto.
Seisluces: Revólver.
Semáforo: De mal agüero.
Semblantear: Observar fijamente.
Semifusa: Bastón que utilizan los policías.
Sensa: Sin.
Sequeira: Indigente "De seco".
Sequía: Indigencia.
Serpentina, tirar una: Ayudar, socorrer.
Serruchar: Desprestigiar, perjudicar / Fornicar.
Serva: Sierva, fámula.
Servicio: Retrete.
Servir: Zurrar. Golpear, acertar un puñetazo.
Sesenta y uno: En una de las claves numéricas significa “enemigo”.
Sesera: Cabeza.
Shacador: Ladrón.
Shacamento: Robo.
Shacar: Robar.
Shafo: Policía uniformado.
Shiome: Decadente, empobrecido
Shome: Indigente, pobre.
Shomería: Ordinario, mala calidad.
Shuca: Bolsillo exterior del saco.
Shusheta: Petimetre
Siete: Asentaderas.
Sifón: Nariz.
Sire: En la hípica, se refiere al padrillo.
Sobaquina: Tufo axilar (olor).
Sobatina: Roce amoroso.
Sobra: Adular.
Sobrado: Conocido.
Sobrador: Valiente, "castigador"
Sobrante: Sobretodo.
Sobrar: Superar, humillar / Conocer sobradamente.
Sobre el pucho: Ya, súbitamente.
Sobre: Cama.
Socotroco: Puñetazo.
Sofaifa: Mujer.
Soga, dar: Ventaja supuesta.
Solapear: Adular.
Solari: En soledad
Solfa, en: Broma, mofa.
Solfa: Paliza.
Solfear: Robar.
Solfeo: Robo.
Soliviar: Robar.
Sombra: Cárcel.
Sombrerera: Cabeza.
Sonado: Muerto / Loco.
Sonar: Morir / Errar, fracasar.
Sonatina, la: Muerte.
Sonsaje: Grupo de tontos.
Sopardos: Pesos, dinero.
Soprábito: Sobretodo.
Sorete: Informal, tramposo, hombre de poco valor moral.
Sosegate: Puñetazo / Reprimenda.
Sosha: Dinero.
Sotana: Saco, prenda de vestir
Sotreta: Canalla, mentecato
Steca: Soborno.
Sucucho: Vivienda de soltero.
Sueco (Español): Desentendido
Suertudo: Afortunado.
Sultán: Rufián.
Susheta: Elegante.
LETRA T

Taba: Destino, suerte
Tabas: Piernas.
Tablero: Vidriera, escaparate. Traste, asentaderas.
Tablón: Experiencia.
Tacañún: Amarrete.
Tacañuzo: Avaro.
Tachería: Relojería.
Tachero: Conductor de taxi, taxista.
Tacho: Reloj / Asentaderas. Taxi
Tachómetro: Reloj.
Taita: Hombre valiente y audaz. Matón
Tajada: Soborno.
Talompa: Pantalones.
Tamangos: Zapatos
Tambo: Prostíbulo
Tanga: Ocasión / Fraude, engaño.
Tapamugre: Sobretodo.
Taquera: Bailarina contratada.
Taquería: Comisaría.
Taquero: Comisario de policía
Taradez: Torpeza.
Tarado: Idiota.
Tarro, mear fuera del: Errar, equivocarse.
Tarro: Suerte / Asentaderas.
Tarros: Zapatos, botín.
Tarrudo: Afortunado.
Tarugo: De baja estatura.
Tarumba: Atontado, enloquecido.
Tarúpido: Tarado y estúpido.
Taura: Audaz
Tayador: Banquero.
Tayar: Mandar, el que ordena.
Tayarín: Banquero.
Tela: Dinero.
Telefunken: Teléfono.
Telo: Albergue transitorio.
Tenacear: Atrapar, agarrar.
Ternera: Mujer, jovencita.
Terraja: Vago.
Terraza: Cabeza.
Testamento: Cabeza.
Tetera: Sostén.
Tigre: El que ejecuta una acción con energía y habilidad.
Tigrero: Audaz, valiente, que ejecuta acción temeraria
Tijeretear: Chismear.
Tilingo: Cursi.
Tilinguerío: Cursilería.
Timba: Juego
Timbear: Jugar.
Timbero: Jugador por dinero
Timbo: Zapato botín
Tintacho: Vino.
Tintiyo: Vino.
Tiñuso: Avaro.
Tipa: Cárcel.
Tira: Policía de investigación.
Tirado: Indigente / Deprimido.
Tirar el carro: Vivir a expensas de alguien.
Tirifilo: Petimetre.
Titear: Mofarse, bromear.
Titeo: Mofa, broma.
Tocado: Sobornado, enloquecido.
Tocar: Sobornar.
Toco: Paquete con dinero.
Toldo: Cabellera.
Tole tole: Alboroto, gresca
Tololo: Chabón.
Tomado: Borracho.
Tomárselas: Irse rápidamente.
Tongo: Trampa, fullería
Tordo: Abogado o médico.
Torniquete: instrumento que usan los escruchantes para forzar rejas.
Torniyo: Frío.
Torta: Lesbiana.
Tortera: Lesbiana.
Tortiyera: Lesbiana.
Torvelo: Dinero.
Tostero: Mentiroso.
Tosto: Mentira.
Trabucarse: Confundirse.
Tracalada: Multitud, gran número de personas
Tragada: Estafa, fraude.
Tragar: Estafar, defraudar.
Trajeado: Vestido con traje.
Tranca: Borrachera
Tranquear: Caminar, andar.
Tranquila, la: Cama.
Tranquilino: Indolente.
Tránsfuga: Pancista, desleal.
Trapero: Persona que junta desperdicios.
Tras cartón: Súbitamente. Inmediatamente.
Traste: Asentaderas
Treinta y cinco: En una de las claves numéricas significa “bombardeo”.
Trenzada: Disputa.
Trepador: Pancista.
Trincar: Agarrar, atrapar / Fornicar.
Trolo: Invertido, gay.
Trompa: Patrón.
Trompeado: Zurrado.
Tronco: Chambón, torpe
Tropeadura: Zurra.
Trotadora: Ramera.
Trotera: Ramera.
Trúa: Borrachera.
Trucha: Cara.
Tubo: Teléfono.
Tumba: Trozo de carne hervido en agua, comida de las cárceles
Tumbadero: Albergue transitorio.
Tumbado: Deprimido.
Tungo: Caballo (aféresis de matungo).
Turra: Ramera
Turro: Incapaz, inepto, necio
Tute: Enojo.

LETRA U

Untar: Sobornar.
Upa, de: Gratuitamente.
Upite: Asentaderas, Suerte

LETRA V

Vagón, un: Muchos, en cantidad.
Vagoneta: Haragán, vago.
Vaivén: Cuchillo, arma blanca.
Valenciano: Levantajuego.
Valeriano / valerio: Vale del Turf.
Vamo y vamo: Por mitades.
Vejanco: Viejo.
Velas: mocos.
Ventajear: Prevalecer / Exceder.
Ventanas: Ojos.
Vento: Dinero
Ventolín: Guita.
Ventolina: Vento, dinero.
Ventudo: Adinerado.
Verano: Vergüenza.
Verdolaga: Billete de diez pesos que circuló hasta 1947
Verduguearse: Castigarse.
Verdurita: Fruslería.
Versátil: Pancista.
Versero: Tipo que habla sin conocimiento.
Verso: Reiteración constante.
Vía, en la: Indigencia.
Viaraza: Enojo, resentimiento.
Vichadores: Ojos.
Vichar: Astibar, espiar.
Vichenzo: Tonto.
Vidrieras: Prismáticos.
Vigil: Guardián.
Vinacho: Vino.
Vinagriyo: Vino.
Viniso: Borracho
Viniyo: Vino.
Viola: Guitarra
Violero: Guitarrista.
Viorsi: Baño
Viscachazo: Ojeada, mirada.
Viscachear: Observar disimuladamente.
Viuda: Billetera, cartera.
Vivanco: Despabilado, astuto.
Viviyo: Despabilado, astuto.
Vivo: Despabilado, astuto.
Viyuya: Dinero.
Viyuyera: Billetera, cartera.
Voracero: Valentón.
Votacén: Centavo.
Vovi / vovina: Despabilado, astuto.
Vuelo: Experiencia

LETRA Y

Yanta, en: Indigente.
Yeca: Experiencia.
Yeite: Ocasión / Asunto / Asunto dudoso.
Yeta: Influjo maléfico, suerte adversa
Yeyatore: Tipo de mal agüero.
Yigoló: Individuo joven mantenido por una mujer mayor
Yira / yiranta: Ramera.
Yiradicta: Ramera.
Yirar: Andar.
Yiro: Ramera.
Yompa: Pabellón.
Yoni: Inglés
Yugaba: Trabajaba esforzadamente.
Yugador / yugante: Trabajador.
Yugar: Trabajar.
Yuguiyo: Cuello de camisa
Yunta: Pareja, compañía
Yurno: Yorno, día.
Yuta: Personal policíaco
Yuto: Desleal, falso / Policía de investigaciones.

LETRA Z

Zarzo: Anillo
Zafar: Escapar, librarse.
Zampar: Enjaretar / Encajar.
Zanagoria (Zanahoria): Tonto.
Zapaba: Trabajaba.
Zapar: Trabajar esforzadamente.
Zaparrastrozo: Andrajoso.
Zapayaso: Azar, imprevisto / Puñetazo.
Zapayero: Desordenado.
Zapayo: Cabeza.
Zaranda: Zurra.
Zarpar: Irse rápido.
Zumbarse: Drogarse.
Zurdo: el corazón.

Bailes clasicos Argentinos

TANGO:
Dicen que la palabra tango es anterior al baile y que por el año 1803 figuraba en el diccionario de la Real Academia Española como una variante del tángano, un hueso o piedra que se utilizaba para el juego de ese nombre. Pero ya en 1889 la institución normativa de la lengua incluía una segunda acepción del tango como "fiesta y baile de negros y de gente de pueblo en América". Sin embargo, debieron pasar casi 100 años para que el diccionario definiera al tango como "baile argentino de pareja enlazada, forma musical binaria y compás de dos por cuatro, difundido internacionalmente".
Otros estudiosos de la música ciudadana argumentan que el vocablo es propio de las lenguas africanas que llegaron con los esclavos al Río de la Plata y cuyo significado sería "lugar cerrado".
Es muy probable que tango sea una voz de origen portugués introducida en el nuevo continente a través del dialecto criollo afro-portugués. Al comparar tango y tambo, Blas Matamoro afirma que ambas son onomatopeyas del tam-tam o candombe utilizado en los bailes negros. Más aún, en dialecto bozal la expresión era "tocá tango" o "tocá tambó" (toca el tambor) para iniciar el baile. El lugar de reunión de los esclavos, tanto en África como en América, era llamado tango.
Y así nombró Buenos Aires a las casas de los suburbios donde, a comienzos del siglo XIX, los negros se encontraban para bailar y olvidar temporalmente su condición.


De fecha imprecisa y origen aún más incierto, hay teorías que remiten a sus raíces negras y otras que aseguran su origen inmigratorio. Lo cierto es que a mediados del 1800, los conocidos conventillos de la pujante ciudad de Buenos Aires se llenaban de paisanos del interior, "gringos" recién bajados del barco y varios porteños de pocos recursos que, quizás para diferenciarse o para generar arraigo, marcaron con impulso propio las nuevas expresiones populares.
Mezcla de códigos cerrados y con lenguaje particular, el tango germinaba en las casas de baile, orillaba el Riachuelo, los boliches de carreros y cuarteadores, los conventillos del barrio sur. Por esos años, muchos de los inmigrantes venían solos y las pocas mujeres que venían se encontraban en las academias o en las casas de citas.
La Buenos Aires de los '80 poco a poco se descubría en las academias y en los teatros. En las comedias, zarzuelas y otras obras, los actores empezaron a cantar y bailar tango.
Las academias, también llamadas peringundines, funcionaban sólo bajo autorización en los suburbios o barrios alejados del centro y, si bien en principio eran sólo para hombres, después incorporaron mujeres contratadas para bailar.

Los guapos, compadritos y malevos se encontraban en el Café Sabatino, el Almacén de la Milonga y el Viejo Bailetín del Palomar. En los boliches de la calle Necochea de La Boca, empezaba a escucharse esta música alegre, juvenil y pícara que, bajo el ritmo del dos por cuatro, ejecutaban Rosendo Mendizábal, Eduardo Arolas, Angel Villoldo y otros autodidactas que componían sin conocer las partituras.
El tango dejaba de ser exclusivo del arrabal para internarse poco a poco en el centro de la ciudad. Los organitos callejeros lo difundían por los barrios donde era común ver parejas de hombres bailando en las calles.
Esencialmente porteño, muchos escritores consideran que el tango de finales del '80 combinaba varios estilos de música. En él estaría involucrada la coreografía de la milonga, el ritmo del candombe y la línea melódica, emotiva y sentimental de la habanera. Pero también recibió influencia del tango andaluz, del chotis y del cuplé, a los que se agregan las payadas puebleras y las milongas criollas.
Se cree que el primer compositor de tango fue Juan Pérez, autor del tango Dame la Lata. Sin embargo, es muy probable que hayan existido otros autores y canciones anteriores. Además de la obra de Pérez, las primeras composiciones fueron El Tero y Andate a la Recoleta.
Si bien sus orígenes todavía polemizan las mesas de café de los tangueros, no se discute el prestigio y reconocimiento que adquirió internacionalmente.
Como toda auténtica expresión artística, el tango desentraña nuestra inextricable condición humana, revelando el espíritu porteño. Quizás debido a esta verdad, vive en los barrios de Buenos Aires y en las academias de Japón, en las calles de París y en los centros culturales neoyorquinos.
FOLCKLORE-----
En el lenguaje cotidiano, al aludir a la música tradicional -sean danzas, canciones o creaciones basadas en los ritmos o acentos reconocidos como criollos -, hablamos de folklore.
En realidad, se trata de una simplificación, algo así como un resumen de lo que técnicamente debería citarse como proyección artística folklórica musical: la acepción literal del término folklore significa "el saber del pueblo" (fofk: nación, pueblo: lore: saber, conocimiento).
Una apreciación erudita señala que, en realidad, se trata de la época de la tradición, que a su vez evoca los mecanismos por los cuales heredamos lo que fije propio de los mayores y conservamos a través del tiempo.
Esto no significa que se mantengan intactas las costumbres, sino que pueda apreciarse en ellas el núcleo de la llama (el rescoldo), aunque se evidencia que va perdiendo eficacia vital en los modos sociales.
Siempre hay como conducta una superación de moldes que en nombre del progreso intentan sustituirse: una buena pregunta en este punto es si los contenidos intrínsecos de una vidala o la interjección del sapucay pueden quedar desafectados o pasados de moda.
Es evidente que en estos últimos años el mundo se ha ido interrelacionando de tal forma que -1os figurines - en lo que a productos musicales se refiere cobran tal dimensión que, por lógica, derraman sus influencias y, en dosis imperceptibles, comienzan su accionar modificatorio sobre los gustos y las costumbres.
Una cuestión esencial radicaría entonces en cotejar la continuidad superviviente de aquéllas y estas otras presencias.
Para epilogar esta inagotable especulación basta recordar una síntesis brillante que puntualiza que el folklore es el patrimonio de las capas subyacentes que aflora en la cultura de las naciones civilizadas.
¿Cómo éramos?
Por supuesto que nosotros existíamos mucho antes de la llegada hispánica.
De los capítulos incaico, maya o azteca se conoce bastante. En cambio, en lo relativo a nuestro territorio, la información es casi inexistente.
La influencia oriental incaica en el noroeste (los quechuas) es tan poderosa en irradiación, que desde Jujuy llega hasta el norte de Mendoza, abarcando Catamarca, Santiago del Estero, La Rioja, y prolongándose en toponimios, por ejemplo, hasta La Pampa y Buenos Aires.
Prudente es entonces plantear los afincamientos originales, para luego determinar la llegada de las corrientes españolas dominadoras, que darán paso al nacimiento de algunas maneras, entre otras la música, que conocemos como folklore o proyección folklórica.
A los asientos nativos o indígenas habría que adosarle un elemento imprescindible: el encuentro con las fuerzas dominadoras españolas, que además de la posesión territorial, la dominación o imposición cultural que ejercieron, derramaron una impronta digna que al ser interpretada facilitará la comprensión de muchos hechos.
Traían una sola lengua. Profesaban una religión. Y practicaban fundaciones que, al decir del profesor Bruno Jacovella, se realizaban de arriba hacia abajo. Desde la ciudad primero, a los poblados o asentamientos periféricos, después.
Y siempre con un sentido utilitario y definido: facilitar el corredor hacia y desde el Alto Perú.

Otro de los asuntos singulares de nuestra Nación es que no ofrece accidentes insalvables o barreras geográficas que lo obliguen al hermetismo, incomunicándolo o encerrando las comarcas. Prácticamente desde Jujuy hasta el extremo sur, ondulaciones centrales aparte, la planicie facilita la comunicación y ha sido el elemento que allanó una movilidad sin obstáculos.
Aquellos cañadones, ríos o elevaciones pampeanas parecían como escollos menores en relación a lo intrincado de otras latitudes del mundo, como puede ser Europa.
Esto jugó un trascendente papel para que el Alto Perú primero y Buenos Aires después, se convirtieran en centros de irradiación que imprimieron cierta dinámica a los contingentes migratorios.
Ingresando por el noroeste, con punto de partida en Perú los llegados de lejos caminan leguas interminables, pertrechados con elementos que son imbatibles y vitales para la dominación. Pero, además, con estrategias y poder de combate.
Las huestes hispánicas y sus cuadros llegan hasta lo que es hoy es área de Santiago del Estero. Fundan la primera ciudad y sobreviven a los avatares ya suficientemente contados por los historiadores e investigadores.
Otros incursionan por el Río de la Plata. A medio camino hacia el norte, sobre la vera occidental del río Paraná, y previamente en las tierras vecinas del gran río-mar deciden dar por iniciada la historia de Santa Fe y Buenos Aires respectivamente: la vía
fluvial resulta, de esta forma, otro corredor de hombres blancos, cristianos e hispanoparlantes.
La tercera presencia formal que sembrará en estas tierras sus semillas de cultura nueva afronta un desafío natural - La Cordillera de los Andes, nada menos -, que los recién llegados encaran tan resueltamente que padecieran quitarle importancia, convirtiéndola en un camino que, originado en el Océano Pacífico, se prolonga hasta las estribaciones serranas de San Luis.

Noroeste,
la influencia peruana
La región más fuertemente sometida la influencia peruana colonial es la integrada por las naciones diaguita y comechingona, prolongándose hasta el borde mismo de la selva chaqueña.
Constituye lo que hoy ocupa los territorios de Salta, Tucumán, Catamarca, La Rioja, Santiago del Estero, Córdoba (zona serrana y montes) y algo de San Juan.
El investigador Carlos Vega identifica como expresiones musicales las especies líricas y coreográficas llamadas vidala, baguala, zamba y cueca (la porteña más breve que la cuyana).
Llamará la atención ciertas ausencias muy tradicionales y no incluidas: esto se debe a que estas consideraciones responden a los primeros años del siglo XIX, no existiendo basta 1850, aproximadamente, ningún rastro que certifique si, por ejemplo, ya se bailaba chacarera, la danza por excelencia que identifica al área santiagueña.
Al respecto puede apuntarse que la otra danza típica de la región, el gato, tiene cierto parentesco con la mencionada chacarera y los primeros rastros para asignar autorías o recopilaciones pueden asignarse a Andrés Chazarreta (primera década del 900), Manuel Gómez Carillo (1920/23), Beltrame (1924) y Ana S. de Cabrera (1925).
En lo referente a instrumentos, los originales según la tipificación de Vega- son el violín, el bombo, el arpa y la caja: algunos incluyen el erque, hoy recluido en la zona de influencia jujeña.
Además, como base primaria constatable tanto en el repertorio musical como en la tradición heredada en el tiempo, no puede desconocerse la presencia de costumbres como el topamiento de las comadres, el carnaval y las comparsas indígenas, los pesebres, los misachicos y en las comidas: tamales, rosquetes, alfajores. Las composiciones poéticas como glosas. El uso del telar (español), alguna habilidad con el cuero, las prendas criollas de lana y otros elementos de elaboración y consumo (algarroba y otras fermentaciones), junto al pastoreo doméstico de cabras y ovejas, el quesillo, etcétera.
Oeste(Cuya),
La influencia Chilena
La característica que resalta el costumbrismo regional es la necesidad de procurarse regadíos que faciliten la vida en un vasto desierto, suponiendo una población muy laboriosa y concentrada que, en efecto, fue desde siempre.
Esta será la razón por la que desde allí partían los suministros al acódente cordillerano por pasos de facil tránsito, lo que, al decir de los investigadores, estableció una vinculación profunda con el vecino país.
Mendoza, San Juan y San Luis son las tierras que conforman esta región. Por San Juan y Mendoza pasaba un camino que llevaba por un lado a Chile, y por otro al Alto Perú, atravesando La Rioja y Catamarca, lo que hace fácil detectar originariamente dialectos araucanos y, musicalmente, la cueca, que en Mendoza se parece más a la chilena y, en áreas catamarqueñas, a la boliviana.
En la región es característica también la tonada, con un aire al estilo (de otra región) pero más elaborada artísticamente.
La cueca, en cambio, es de movimiento vivo, bien al estilo chileno. Carlos Vega afirma que en San Juan se han hallado vidalitas andinas y, como esta tierra pertenece al sistema de las l1amadas Sierras Pampeanas, comparte muchos elementos culturales con La Rioja y Catarmarca.

Este, la región pampeana
Y el Río de Plata
Así como el cuyano ha sido labriego y abnegado, el habitante de esta región -con el río Paraná al este y atravesado por el Camino Real que conducía al Alto Perú-, encontraba amplias facilidades para conseguir lo fundamental sin mayor trabajo.
Abundancia de ganado suelto, ausencia de madera, ramas espinosas o piedras para levantar cercas, impidieron que aquí se desarrollara la vida aldeana, que tiene su principal argumento en la apicultura.
Toda la vida empieza a concentrarse en la ciudad que se expande. En su puerto. En las quintas y en los establecimientos que son el origen de estancias y explotaciones tan características en este siglo.
Los rasgos musicales folklóricos mencionables tienen una decidida influencia europea y brasileña. Algunos llegan desde la Banda Oriental y se superponen a desteñidos vestigios de la cultura peruana que sobrevivían en la zona.
La milonga, la cifra, el prado, la huella y ciertas danzas como el minué u otros derivados son los ritmos musicales más característicos.
Algunos aparecieron incluidos en el folklore santiagueño, presumiendo que llegaron llevados por el circo, por supuesto con los retoques pertinentes, y más o menos sobre el fin del siglo pasado.
Los folklorólogos señalan que la profusión literaria que refleja la vida del gaucho no tiene documentación que le acredite la relación contemporánea con los nativos de otras regiones.
El gran protagonista de la historia artística musical, el gaucho, existió indudablemente con la vida azarosa que trascendió fundamentalmente a través de la literatura: de aquí para allí siempre huyendo del indio, de la ciudad (Buenos Aires) y/o de los fortines.
En lo musical, el gran producto inspirador y testigo de los cantos de esta región se produce recién en este siglo.
En cambio, el monumental "Martín Fierro" de José Hernández, cumbre literaria del género, se había editado en 1872.
Este, la región litoraleña
y el Río Paraná
Para dilucidar los modos originales de esta área hay que determinar que está integrada por los territorios que hoy ocupan las provincias de Santa Fe, Entre Ríos, Corrientes, Misiones, Chaco y Formosa pero vale la pena registrar algunas aclaraciones: a los fines de este trabajo Santa Fe, en sus comienzos, quedaría incluida como prolongación de La Pampa; y Misiones, por razones históricas y hasta geográficas y geológicas, constituye un mundo aparte de Corrientes y Entre Ríos; a su vez éstas muestran poca afinidad entre sí.
Poco conocida es la ruta primitiva de la yerba mate o la Ruta de la Asunción que, partiendo de Buenos Aires por Santa Fe cruzaba el río hasta la actual capital entrerriana, y seguía por la costa del Paraná o del Uruguay hasta Corrientes y Posadas, y de allí a Asunción por la actual Encarnación.
Y esto, ¿por qué?
Entre los argumentos, se recuerda la presencia de los bravos guaicurúes que administraban la margen derecha del Paraná y la margen izquierda del Río Paraguay y también de los indios canoeros, que acechaban en las propias vías navegables: todos estos peligros obligaban a los viajeros a buscar rutas seguras para eludirlos.
En las Misiones los jesuitas eran tan protectores de sus indios ante los ataques o pretensiones de españoles o lusitanos, que formaron casi un mundo aparte.
Si se considera luego el mestizaje en la proporción enorme que se dio y la consecuente extensión de la lengua guaraní en todas las capas sociales como habla familiar, más el clásico temperamento levatísco de los asunceños, la autonomía que les
dio la explotación del suelo (yerba, azúcar, alcohol, madera, carne, cuero, maíz, mandioca), y cierto espíritu de retraimiento generado por el largo abandono del poder central durante las largas luchas contra los portugueses, se puede explicar la segregación de la provincia del Paraguay y algunas características particulares de la sociedad criolla correntina, como bien apunta Bruno Jacovella en "Folklore Argentino".
En lo que a danzas se refiere, la pareja enlaza es la característica que distingue a la polka antecesora genealógica del sobresaliente chamamé.
Se dice que al retirarse la Compañía de Jesús (los jesuitas), al tiempo que dejan rasgos indelebles por su pedagogía de hondo contenido moral, la polka pasa a ser mediante reelaboraciones imprevistas, la carátula musical de esa tierra.
En Entre Ríos, la colonización se mantuvo en las costas de ambos cauces (Paraná y Uruguay), hasta que los indios y la selva fueron extinguidos.
Por esa razón se explica la colonización tardía (siglo XVIII), al desaparecer el espinoso monte y la condición irreductible de los indios.
El idioma guaraní se choca en esta provincia con una barrera invisible, un muro de contención.
Tristes peruanos, cantares con glosa y estilos son los aires musicales: la representatividad de la chamarita habría que rastrearla, como danza, en el 1850 aproximadamente, existiendo datos firmes de prácticas frecuentes recién en los primeros
años de este siglo.
La Puna
Y el Camino del Inca
En este sucinto panorama contemplativo del paso español y las características básicas de los nativos de cada región, no puede sino considerarse un sustrato de alto contenido aborigen, casi apartado de los lineamientos característicos culturales explicados hasta aquí: esa zona es el macizo puneño, con ruta directa al Atiplano y al
Pacífico.
Por allí pasaba el Camino del Inca con destino a La Rioja. Por otra parte también era transitado por aquellos viajeros peninsulares ingresados por el noroeste y que bajaban por los Valles Calchaquíes. También hay rastros de indios humahuacas por la misma vía.
Sus habitantes se distinguen por ser muy devotos del culto de la Pachamama (tierra madre), plagados de creencias mitológicas, usuarios del quechua, con ritos mortuorios y distantes del concierto cultural criollo.
La Quebrada de Humahuaca es el gran reservóreo de estos perfiles que, por supuesto, han rebasado ese entorno, considerándose lo más puramente aborigen de nuestro país.
Erkes, sikus, antaras, quenas (aerófonos) y caja (percusión) son los instrumentos catalogados de indígenas. Muy posterior es la creación del charango.
Area santiagueña
Orígenes e historia
Cuando se inicia el recorrido por el largo camino del arte folklórico nacional es obvio partir del centro-norte del territorio, dado que allí se funda la "primera ciudad" y, paradójicamente, en los años últimos -al igual que en el comienzos- el fenómeno musical es originado de esas tierras.
Los datos y apreciaciones son el resultado de lecturas y autores dados, pero recogen como aporte valiosísimo el que hiciera Elvia Aroldo Avila desde su Santiago del Estero Indo-Hispania Linguistica. Como dice el santiagueño. Es uno de los territorios donde se conservan con gran vigencia las pautas sociales - culturales -tradicionales.
En el interior del espacio santiagueño el estilo de vida se manifiesta con una continuidad en el estilo campesino: vivienda modesta, vida al aire libre y contacto permanente con la naturaleza.
El uso de utensilios y elementos de origen precolombino continúa en plenitud y le da un rasgo sobresaliente al área (morteros, bateas, ponchos, telares). Entre los alimentos, el locro, tamales, humitas (maíz omnipresente), tortilla, mate, algarrobo, tuna, miel...
La falta de urgencias ha determinado un manifiesto silencio, notándose una actitud humilde y gente callada.
Como contrapartida, su espíritu es de gran vitalidad y se distinguen par la hospitalidad y cierto grado de desinterés o desprendimiento.
Por el cancionero trasciende la compenetración del santiagueño con sus dos grandes ríos, el Dulce y el Salado -Los Hermanos Abalos, en "Casa más, casas menos", hablan de la región donde ~ registra el origen de las culturas mesopotámica entre el Eufrates y el Tigris, "comparándola" mi Santiago y sus Dulce y Salado-. En ocasiones
esas citas se hacen en quichua, mishqui mayu (río Dulce) y cachi mayu (río Salado).
Característica del nativo contemporáneo ha sido la inmigración en procura de mejores horizonte.
Esto explica la facilidad para encontrar por el país alguno de los 600 mil santiagueños, que se estima es el contingente que ha partido de su provincia natal.
Los mismos lugares utilizados por el aborigen para su vivienda (la mesopotamia) fueron los escogidos por el español durante la conquista.
Uno en las márgenes del Dulce, tomando como centro, la hoy ciudad de Santiago del Estero, extendiéndose para el departamento de Río Hondo, aproximadamente en 1550.
Otro, en el sector central del río Salado, por ambas márgenes del río, hacia el norte y el sur.
Al considerar la irradiación cultural primitiva se le adjudica a los jesuitas y otras órdenes religiosas, que cruzaron el Salado los primeros pasos en ese sentido. A fines del siglo XVI y principios del XVII. Luego, se produce un segundo pasaje en el siglo XVIII (1735) cuando instalan la reducción de Don José de Vilelas, en las proximidades de Santiago.
Aquellos "reducidos" eran abipones, diaguitas, vilelas y matarees, que en períodos distintos habitaron la zona.
Con respecto a la lengua dominante no hay acuerdo sobre cuál era la usada: tiempo atrás, algunas teorías apuntaban a los calchaquíes y diaguitas, que utilizaban el cacano. Estos indígenas fueron "vecinos" de la ciudad del Barco (primitiva y original denominación de la hoy Santiago), pero la especulación sobre el uso de su lengua hoy está terminantemente desmentida.
El 25 de julio de 1553, en la margen derecha del río Dulce, el capitán español Francisco de Aguirre funda un asentamiento al que llanta Santiago del Estero del Nuevo Maestrazgo, en homenaje a Santiago Apóstol (ese era su día), y "Estero" por la gran cantidad de tierras inundadas que había por los desbordes del río.
En realidad esta conquista tiene un dato previo en del año 1542, cuando llega Diego de Rojas que descendiendo por el Camino del Inca (desde el valle de Humahuaca) anduvo las zonas, que resultaban pródigas por el suministro y el descanso
en aquellos tiempos.
Rojas fue el primero, en llegar, cruzando Tucumán e internándose en tierras de Santiago. Se cree que fue muerto en un ataque indígena, en lo que se llama hoy Villa La Punta.
Otro bizarro español, siete años después (1549), salió desde el Perú con el neto afán de extender la fe y consolidar fundaciones católicas, se llamaba Juan Núñez del Prado y, cerca de la actual Monteros (Tucumán), fundó Barco I, trasladada luego a Talavera (Salta) y rebautizada Barco II.
Finalmente, en las inmediaciones de la actual capital provincial, se asienta Barco III.
Tan estratégica fue la presencia del enclave santiagueño que desde allí partieron quienes fundaron Tucumán (1565, -Diego Villaroel), Córdoba (1573, Jerónirno Luis de Cabrera), Salta (1582, Hernando de Lerma), La Rioja (1591, Juan Ramírez de Velazco) y Jujuy (1593, Francisco de Argañaraz).
Este collar de radicaciones y/o fundaciones es la que lleva a referirse a Santiago del Estero con "Madre de Ciudades", aunque otras creencias sostienen que se debe sólo al mérito del haber sido la primera.
Puedes escuchar los siguientes ritmos en forma de archivos midi.
Carnavalito Danza popular del norte argentino.Secuencia y arreglo por Néstor M. Godoy
Chamamé Danza del litoral argentino.Secuencia y arreglo por Néstor M. Godoy
Cueca Danza del Noroeste argentino.Secuencia y arreglo por Néstor M. Godoy
Gato Danza Tradicional Argentina.por Amelia Fusco, sec. por Claudio Griggio
Malambo Danza tradicional argentina.Secuencia y arreglo por Néstor M. Godoy
Pericón Danza de salón colonial argentina.Secuencia y arreglo por Néstor M. Godoy
Ejecutados en piano por Amelia Fusco, secuenciados por Claudio Griggio (Indio Producciones)
La Firmeza Danza tradicional
La Doble Chacarera doble
Cueca de los Coyas Cueca
La compañera Zamba
Escondido de los montes Escondido (danza argentina)
La Pomeña Zamba
ZAMBA:
LA ZAMBA
Historia:

Deriva de la zamacueca y se bailó en el siglo pasado en todas las provincias argentinas, y actualmente aún se conserva alguna vigencia en las occidentales y norteñas. Es, junto con la chacarera, el género más difundido de música autóctona.
Andrés Chazarreta publicó su versión de la "Zamba de Vargas" en 1906.
La "Zamba", última descendiente de la antigua "Zamacueca" peruana, reúne en su juego coreográfico las características de un poema, donde se sintetiza todo el proceso amoroso que el hombre aspira cumplir como esencial función de la vida. Es la danza con trayectoria histórica más documentada, y la más discutida con respecto al origen de su denominación y procedencia. Con el titulo de "Zamba", aparece anotada por primera vez en "Recuerdos de Treinta Años", de José Zapiola, definiéndola "como muy popular en Chile entre los años 1812-1813", y nuevamente apuntada por María Graham, el 5 de setiembre de 1822 en su "Diario de Residencia en Chile". Además es reconocida indistintamente como "Zama-cueca", "Cueca", "Marinera", etc., denominándosela "Chilena" en las provincias de Salta y Jujuy, designación que se popularizó hasta en el Perú, cuna de este baile, donde se cultivó con entusiasmo y se la consideró como una verdadera danza nacional, hasta que sobrevino la guerra con Chile(1879). A partir de ese momento y no viendo con simpatía aquella denominación que les recordaba el nombre de sus contendores, a instancia del intelectual y humorista Abelardo Gamarra, más conocido por el seudónimo de "El Tunante", cambió el rótulo de "Chilena" por el de "Marinera", en homenaje a las hazañas del "Huáscar", buque de la marina peruana. La "Zamba", cumbre de nuestras danzas tradicionales, es reconocida con ese nombre en las provincias mediterráneas y con el de "Cueca" en toda la región cordillerana. Su juego mímico es altamente significativo; los pañuelos que lucen los bailarines, actúan como transmisores mudos pero elocuentes del sentir de los intérpretes, destacándose la intención del varón en el propósito de conquistar a la dama
EL TRIUNFO--------
El Triunfo
Esta danza, tan ágil y significativa, que constituyo en sus principios un omenaje a los bravos patriotas que asegurarón la libertad americana con sus triunfos de armas, bailose en la campña de todas las provincias aproximadamente desde 1825 hasta1900. En algunas regiones, como en la provincia de de Santiago de Estero, perduró hasta las primeras decadas de nuestro siglo.
En algunas provincias tuvo también vigencia en los salones, en los cuales se bailó con mayor discreción que en la campaña –donde fue todo agilidad vigor y soltura- tal como ocurrió con todas las danzas en general.
En las coplas más antiguas se nombra a los “Godos” (realistas) y a los patriotas, aludiendo sin duda a los soldados criollos que sellarón la independencia americana; he aquí una de las más tipicas.
Este es el triunfo, niña
de los patriotas
que caigan realistas
como gaviotas.
Hay constancias que se bailo en el Perú en la primera mitad del siglo pasado, y es posible que no haya llegado desde allí como tantas otras danzas.

CHACARERA------------- Chacarera
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Pertenece al folklore vivo, pues aún se baila al natural en los ambientes populares de algunas provincias. Al respecto dice La Ñusta que es posible encontrarla "en Catamarca, Salta, Tucumán, Santiago del Estero, sur de Jujuy, La Rioja, Cuyo y parte de Córdoba".
Aretz recogió Chacareras bajo los nombres de Chacra y Molino, en el oeste de Córdoba.
En cuanto a las versiones musicales antiguas de la Chacarera, podemos mencionar, entre otras, las de Andrés Chazarreta (1911, 1916, 1920, etc.), las de Manuel Gómez Carrillo (1920 y 1923), etc.
Características generales

Especie folklórica de la República Argentina, con excepción del litoral argentino, se la conoce y practica en casi todo el país. Pertenece a las danzas de carácter vivo, de pareja suelta e independiente. Su origen es difícil de determinar, está emparentada con otras especies como el Gato, el Escondido, el Marote, el Palito, el Ecuador y el Remedio, entre otras.

Modos utilizados: las chacareras son en su mayoría "bimodales", utilizando la escala con terceras paralelas llamada por el musicólogo Carlos Vega "seudolidia menor" - mezcla entre escala menor melódica y lidia (mayor con 4º aumentada) -, aunque existen también chacareras en modo menor exclusivamente y en muy poca proporción en modo mayor.
Rítmica: Como otras danzas emparentadas con la chacarera, sus pies rítmicos ternarios (subdivisión ternaria) en la melodía en compás de 6/8, forma birritmia con el acompañamiento de los bajos o la percusión del bombo en 3/4.
Es una danza alegre y vivaz, de pareja suelta e independiente que tiene cierto parentesco con el gato. Como en casi todas las danzas los bailarines simulan un juego de amor y galantería.
Un detalle particular musical y coreográfico es que sus vueltas pueden tener 6 u 8 compases.
Entre sus variantes encontramos:
• Chacarera doble:
Es una variante de chacarera, originaria de Santiago del Estero. Se diferencia de la chacarera porque al bailarla se hace un giro después de la mudanza y antes de dar la vuelta redonda, aparte del rombo que se agrega al comenzar, aunque en algunos casos se emplea el avance y retroceso recto. (p.ej.: Añoranzas)
• Chacarera trunca: se agrega medio tiempo al final lo que le da una característica de síncopa difícil de acompañar con instrumento o bailar. (p.ej.: Como arbolito en otoño)
• Chacarera larga: con algunos tramos más largos que la doble, en especial el agregado de un contragiro (p.ej.: A don Ata)

Existen 4 tipos de chacareras perfectamente diferenciadas en el territorio nacional:
- La Santiagueña
- La Tucumana
- La Chaqueña (salteña del Chaco Salteño)
- La Cordobesa

La chacarera es una danza vivaz que, como la mayoría de las danzas Folklóricas argentinas, se baila en pareja. Esta es suelta - ya que los bailarines no se tocan - e independiente, o sea que hacen solas sus evoluciones, sin combinarlas con las de otra pareja.

Orígenes

Pocos testimonios escritos nos documentan sus orígenes, pero se cree que se bailó después de 1850, en las provincias del norte, centro, oeste de nuestro país.
Según la tradición oral nace en Santiago del Estero, además, el hecho de existir en esta provincia chacareras en verso quechua establecen un factor más que acentúa esta teoría.
La primera versión musical la dio Andrés Chazarreta en 1911.
Pertenece al grupo de danzas picarescas, de ritmo ágil y carácter muy alegre y festivo, gozó de la aceptación del ambiente rural y también de los salones cultos del interior hasta fines del siglo pasado, abarcando todo el país excepto el litoral y la Patagonia. Es una de las pocas vigentes, es decir que aun se baila especialmente en Santiago del Estero - donde se arraigó con gran fuerza - y en Tucumán, Salta, Jujuy, Catamarca, La Rioja y Córdoba; su difusión abarca por lo tanto, los ámbitos del noroeste, parte del chaqueño y casi todo el central. Hay pocos documentos que nos hablan de su historia, mencionan que seria la más antigua y se baila en Tucumán desde 1850.- Musicalmente consta de cuatro frases en las cuales se cantan las coplas y un interludio que es solamente instrumental, intercalado después de la primera y segunda copla y también sirve de introducción Este interludio una característica coreográfica, ya que puede durar seis u ocho compases y como corresponde a la figura de vuelta entera, varia de la misma forma la duración de ésta.- El acompañamiento musical que se utiliza generalmente es de guitarra, violín, acordeón y por supuesto, el bombo, que se luce con sus típicos repiques. En la coreografía se introduce una figura especial que es el avance y retroceso, que consta de cuatro compases. Al igual que en casi todas nuestras danzas, consta de dos partes. la segunda se baila idéntica a la primera, pero invirtiendo como es característico, la posición inicial.
- Indumentaria femenina: Zapatos de cuero tacón mediano. Vestido de zaraza en dos piezas: Falda con mucho vuelo y adornado con amplios volados aplicados. Bata abotonada adelante con volado puesto como sobrefalda y otros en el borde de las mangas y alrededor del cuello. Peinado en una o dos trenzas sueltas.
- Indumentaria masculina: botas acordonadas con o sin espuelas. Bombacha y chaqueta típica, cortona de bordes rectos con adornos de "alforcitas" o nido de abeja llamadas "encarrujadas". Camisa, cualquiera, blanca o de color, faja, tirador con rastra, o cinta ancha con bolsillos. Pañuelo de seda al cuello con las puntas a media espalda. Sombrero de copa baja, con barbijo, de colores grises, negros o marrón. Cuchillo a la cintura.- Puede bailarse de dos parejas "en cuarto" o compartidas, en cuyo caso los bailarines se ubican en los vértices del cuadro imaginario, teniendo cada caballero al frente a su compañera y a la izquierda a la dama contraria. Las figuras que se comparten son la vuelta entera y media vuelta.

Una Chacarera que hizo historia
La historia musical del Folklore Argentino se remonta a las primeras creaciones criollas, muchas de ellas basadas en la literatura del Siglo de Oro Español, y a la fusión lenta y constante que sufrió con las influencias vernáculas de naturaleza indígena.
Este Folklore, puro y descontaminado, comenzó a registrarse musicalmente, pero sin versos, hacia fines del siglo XVIII y comienzos del XIX. Ya a mediados de 1800 comienza un proceso de acriollamiento y de divulgación de nuestra música y danzas.
En los últimos años del siglo XIX y principios del XX, de la mano del Mecenas del Folklore el Dr. Ernesto Padilla y de recopiladores de la valía de Andrés Chazarreta, o Juan Alfonso Carrizo, el folklore se rescata y se divulga por todo el centro y norte del país. Ya en la década de 1920 se comienza a "proyectar" y las guitarras cuyanas por un lado y la compañía de Arte Nativo de Don Chazarreta por otro hacen llegar el folklore a Buenos Aires: allí se registra el primer gran cambio en la estética musical. Un nuevo cambio se produce con el surgimiento de la poesía salteña de la mano de Dávalos, Portal, Perdiguero, etc. y en la danza con el movimiento que lleva a cabo Santiago Ayala, el Chúcaro. Pero es una chacarera, creada en Tucumán, por poetas y músicos salteños: Los Hermanos Nuñez (Pepe y Gerardo) la que introduce una estética nueva, estilizada y muchas veces resistida... esta es la Chacarera del 55. A continuación transcribiré una nota en la cual se reproducen los ambientes y personajes que rodearon a esta creación musical que impone un antes y después en la Música Folklórica Argentina:
La Chacarera del 55 nació en un boliche de hacha y tiza
El local quedó inmortalizado en una pieza de los Hermanos Núñez.

La nocturnidad en la plaza Alberdi en los 50. Gerardo, autor de la música, evoca los personajes que circulaban por la fonda. Canto, peleas y muertes.


Por Roberto Espinosa

Años 50. Plaza Alberdi. Noche desvelada en el "55". Humo, voces, charla. Gritos, confesiones, angustias. Poemas, llantos, arrepentimientos. Canto, amistad. Una chacarera se dispara rozando el alba. "Del cincuenta y cinco es la chacarera, que mordiendo sueños nos roba la noche entera... De adentro e'la noche vuelve el ciego Pancho, madurada aloja que vuelve desde una copla..." Las voces de Pepe y Gerardo Núñez arrullan la bohemia en sus gargantas y echan a rodar una chacarera por la vida, abriéndole un surco a la memoria del folclore. Los recuerdos emocionan la generosa calvicie de Gerardo Núñez cuando se nombra el "55".

- ¿Cómo era la bohemia en el boliche?
- La chacarera fue compuesta en 1958. El "55" era una mezcla de fonda y restaurante. Sabíamos ir muchísimo con Pepe y Hugo Díaz. Hugo decía que era un boliche de hacha y tiza. En el "55" hubo muertes, peleas... Allí la mataron a La Milonguita, una prostituta muy famosa en la zona y en la época; corría la droga. Había un reservado de dos por dos, no para el amor, sino para el amor al naipe, al vino, a la guitarra.
Cabían una mesa chica y sillas a su alrededor. Ahí nos encerrábamos con Hugo Díaz, Adolfo y Hugo Carmona, Alfredo Grillo, las hermanitas Carmona que cantaban. Adelante estaba el salón. Eramos estudiantes, jóvenes de cantar fuerte... Siempre llamábamos la atención y nos entraron a querer, entre ellos, el ciego Pancho.

- ¿En qué situaciones nace la chacarera?
- En varias. Con mis hermanos Pepe y Canuto habíamos venido de Salta a estudiar arquitectura. No sé si por inspiración o por designio vivíamos a cuatro cuadras del "55". Era esa época estudiantil, el bolsillo era muy flaco y el hambre muy gorda; íbamos a comer -en invierno- la hermosa pavesa que hacían allí, una especie de sopa con ajo y huevo. Fui en forma frecuente durante dos años; era infaltable.

- ¿Cómo eran el Chacho Díaz y Maldonado, los mozos?
- Tendríamos unos 23 años y ellos alrededor de 28. El Chacho era bajón, cabezón, de pelo muy enrulado, y Maldonado era el tucumano típico, de piel cetrina, peinado a la gomina, mucha mecha y de caminar cadencioso, como canción caribeña. Y cerca de las 2 o 3 de la mañana, cuando estábamos en el salón, ellos hacían vaquitas para que fuera el vino a la mesa y luego aparecía la famosa pavesa. Se arrimaban las mesas y terminábamos en una grande, cantando folclore.

- ¿Quiénes caían?
- Caían los croupiers, porque era la época brillante de la zona del Casino. Había uno, muy gastador de la noche y de las chicas buenas y malas... Iban políticos, estudiantes, profesionales que buscaban una bohemia muy especial, en la cual había que ser muy correcto porque había normas instituidas en ese boliche y en la noche. Había que ser respetuoso, aunque no faltaban los borrachos, los pendencieros.
La Chacarera del 55 se va agotando en la madrugada. "Ya me voy solito, angustiando estrellas, velando la macha sencilla de los que queman..."

Primeros pasos de la chacarera en ambientes culturales que le eran ajenos

Texto tomado textualmente del sitio www.chazarreta.com.ar
En el Teatro Belgrano: Tucumán (1916)
( Una reivindicación....)
Don Andrés debió luchar duramente contra la incomprensión de quienes no sabían que de lo telúrico nace el carácter de una Nación.
Entre sus dolorosas frustraciones, se puede mencionar la gira que en el año 1911 inició por TUCUMÁN. Había contratado el Teatro BELGRANO. La primera función fue un gran éxito, con la sala colmada. pero al pretender dar la segunda función, se le presentó el empresario suspendiéndola por orden del Intendente, ya que "ERA INDECOROSO QUE LAS BOTAS SUCIAS DE LOS PAISANOS PISARAN LAS TABLAS DONDE ASISTÍA LO MAS ARISTOCRÁTICO DE LA SOCIEDAD..."
( Una reivindicación....)
Pero años mas tarde (1916) tuvo la gran satisfacción: Cuando asumió como Gobernador de Tucumán, el Dr. ERNESTO E, PADILLA lo invitó a que diera en un salón de esta Ciudad, una función la que se realizó en medio del mas franco aplauso. Don Andrés nunca olvidó el gesto del amigo y tuvo siempre en el Doctor PADILLA a un entusiasta consejero y colaborador. Por eso le dedicó un "estilo-cancion": "La Randera Tucumana". La chacarera se interpretó en un teatro: escenario que le era totalmente ajeno.

La Chacarera se estrena en Buenos Aires
A comienzo de 1921, cuando el tango ya contaba con carta de ciudadanía, irrumpe en la metrópolis el folklore santiagueño. La verdadera música vernácula fue traída de la mano de don Andrés Chazarreta.
El debut tuvo lugar un 17 de Marzo de 1921 en el TEATRO POLITEAMA.
La gracia de los bailarines y las frescuras de las canciones, se ganan de entrada el aplauso del público. Integraban esa Compañía de Arte Nativo, unos treinta gauchos que hicieron un alto en las labores diarias en el campo, para acompañar al Maestro en la conquista de la gran Ciudad, con la humildad y la timidez propia del provinciano que por primera vez salía de su terruño . Guitarras, bombos, mandolín, arpa, flauta, eran la atracción de esta Compañía. Pero el número fuerte era el propio Chazarreta quien ejecutaba su vals "Santiago del Estero" poniendo de relieve su condición de eximio guitarrista.
El comentario de la prensa de esa época fue unánime y coincidente:
"...NUNCA SE VIO EN BUENOS AIRES ALGO TAN NETAMENTE CRIOLLO, TAN TÍPICAMENTE NUESTRO...".
El éxito obtenido por Chazarreta solo puede medirse en la noche de la despedida:
A LOS APLAUSOS DE LA SALA LLENA, SE SUMO UNA LLUVIA DE FLORES QUE CAYERON SOBRE EL ESCENARIO. LA MÚSICA NATIVA AL IGUAL QUE EL TANGO, OBTENÍA SU CREDENCIAL CIUDADANA.-.
Diario LA NACIÓN- 18 de Marzo de 1921
EL GATO------------------
El Gato

Esta movida danza criolla se bailó en todas nuestras provincias, posiblemente desde antes de 1820, y perduró en la mayoría de ellas hasta los primeros años de nuestro siglo. Actualmente aún se baila "al natural" en algunas regiones del norte, centro y oeste, por lo que pertenece al llamado "folklore vivo".
El gato se bailó en varias naciones americanas - Perú, Chile, Uruguay y Paraguay entre ellas- pero fue en nuestro país en donde arraigó con mayor fuerza.
Entre las versiones musicales antiguas citaremos las dos de Ventura Lynch (1883), la de Andrés Chazarreta (1911) y las 3 de Manuel Gómez Carrillo (1920 y 1923).
"Creo que no existirá un gaucho que no sepa por lo menos rascar un "Gato", escribe Ventura R. Lynch en su "Cancionero Bonaerense" (1883), dando así la pauta de la popularidad de esta danza que, bajo distintas denominaciones, se cantó y bailó en México, Perú, Chile, Paraguay y en todo nuestro territorio. Jorge M.Furt, en su libro "Coreografía Gauchesca" (1927), ha identificado -con razones satisfactorias- tomando como base la conocida copla:

Salta la "perdiz", madre
Salta la infeliz;
Que se la lleva el "Gato"
El "Gato" "mis-mis"
A esta misma danza con el nombre de "Gato mis-mis", "Mis-Mis" y "Perdiz". Estas designaciones acerca de las cuales existe amplia documentación, coinciden con los testimonios de que esta danza figuraba antaño en sitio de honor, tanto en las reuniones aristocráticas como en las de campaña, en los países antes mencionados. Es la danza criolla más popular de nuestro acervo folklórico, y ha generado distintas variantes coreográficas conocidas en la actualidad con el rubro de "Gato Bonaerense" o "De la Provincia de Buenos Aires", "Porteño", "Cuyano", "Cordobés", "Gato con relaciones", "Gato encadenado", "Gato polkeado", etc. Todas estas denominaciones no indican nada más que procedencia y ligeras modificaciones regionales o locales, que nunca alcanzan a desvirtuar su filiación. En ciertas ocasiones se les menciona también como "Bailecito" sin que por ello pueda confundirse con la danza del mismo nombre, coincidiendo todos en que se trata del "Gato". Ningún baile ha prosperado tanto como éste, que tuvo el honor de alternar con el elegante "Minué" en el "Cuando", y hasta podríamos asegurar sin temor a equivocarnos, que es el arquetipo de nuestras danzas nativas. Reúne todas las cualidades que corresponden a éstas, dejando amplio margen, por su coreografía sencilla, para que se manifieste la personalidad del hombre y la inconfundible gracia de la mujer Argentina.
MALAMBO------------------
El Malambo

Esencialmente, la danza en que ejecutante solo, hace con los pies, una serie de pequeños movimientos llamados mudanzas.
El malambo no consiste en un zapateo de cualquier clase. La acción de zapatear puede ser complementaria del juego de brazos y manos, por ejemplo: bailarina española o un simple golpeteo rítmico sobre el piso. Nada de eso es el Malambo argentino. Dará que un zapateo pueda recibir este nombre es necesario que produzca mudanzas en serie.
La atención del bailarín y la de los espectadores se concentra en los pies.
Luego esta el contrapunto de zapateadores, una variante de este malambo es la que presenta tres o mas bailarines en sucesión, cada uno baila hasta que agota su repertorio y por resultado se distingue el que ha presentado mayor número de mudanzas o el que hizo las mas complejas y originales. Esta variante se conoció en la Llanura Pampeana y en las provincias de Santiago del Estero, Tucumán y zonas vecinas.
Historia
Es danza extinta la competencia no se limitaba. En la región Pampeana solían atarse un cuchillo en cada pierna y en tanto hacían los movimientos, producían acompasados golpes por entre choques de los cuchillos otras veces, para crearse dificultades, limitaban cada cuatro cuchillos los filos hacía adentro, el pequeño cuadro en que bailaban o cuatro velas las cuales iluminaban los movimientos y creaban el compromiso de no apagarlas o derribarlas. El mérito del danzante era mayor si afrontaba el cotejo sin quitarse las espuelas.
Para todo esto se estipulaba un juez y cruzaban apuestas, la forma regular consistía en la simple exhibición de mudanzas pero a veces se convenía en que cada bailarín debía reproducir las mudanzas que le presentaba el contrario.
Ventura Lynch dice: ¨malambo es el torneo del gaucho cuando se trata de lucir sus habilidades como danzante¨.
Dos hombres se colocan enfrentados las guitarras, inundan el rancho de armonías, un gaucho da principio después para y sigue su antagonista y así progresivamente, muchas veces la justa dura de seis a siete horas.
En Bragado en 1871 vimos un malambo que duró casi toda la noche constando de 76 figuras diferentes por cada uno de los bailarines.
En los populares circos porteños el malambo fue número de equilibristas es decir que lo danzaron en la cuerda.
El diario de la Tarde anuncia el 19 de Noviembre de 1840 que Gervasio Masías bailará el malambo en carácter de paisano y repite el aviso el 9 de Agosto de 1839
¨ El beneficiado que es el mismo Masías bailará el malambo con espuela, chiripa, etc ¨.
Manual Bilbao publicó en la prensa en 1932 nos presenta a Juan Manuel de Rosas bailando un malambo personal. Nuestra danza se conoció también en Chile y Perú.
En fin , el malambo danza individual, se bailo en gran parte de la Argentina, existió en el Perú donde seguramente tomo su nombre y se reconoció en Chile donde el rotulo se conserva adherido a una danza de pareja.
Origen:
Las danzas individuales son con las colectivas las primeras danzas humanas.
En el trance de la pubertad danzaba solo la mujer aborigen para conquistar los beneficios de la fecundidad, danzaba solo el hechicero para conjurar la adversidad.
Hoy no son abundantes las danzas individuales debido a la creación de danza de pareja.
Una de las formas que ha llegado hasta nuestros días en algunas poblaciones peruanas, es individual y de competencia: ¨ dos hombres frente a frente zapatean alternadamente hasta que uno se da por vencido.
Esta es exactamente la del malambo pampeano.
Música:
La primera versión musical del malambo fue publicada por el mismo Ventura Lynch en 1883.
Lo esencial de la música del malambo en u esquema rítmico de seis unidades por compás.
En la región de Tucumán se añade al bombo o a las guitarras un breve tema infinitamente repetido en le llanura oriental, el malambo se baila únicamente al son de una o mas guitarras rasgueadas.
El rasgueo criollo puede utilizar el punto clásico por instantes pero generalmente obtiene el sonido por su especial manera de punteo.
Colocase sobre las cuerdas la mano cerrada, el puño se aplica a la cuerda no a la yema sino al revés la uña la primera falange, y la aplicación varia desde el deslizamiento pleno, de frente hasta el de perfil.
Cronología:
No hay dificultad en ¨ poner ¨ el malambo dentro de los términos del siglo XIX en la campaña pampeana o las zonas del centro y del noroeste. Estos límites pueden extenderse a las dos últimas décadas del siglo XVIII y a las dos primeras del XX.
Es danza ruda pero sobria. De ningún modo pueden aceptarse, sin alterar su estilo los saltos violentos, las contorsiones desgobernadas y los movimientos acrobáticos. La mesura es su característica tradicional en la Argentina.
LA CONDICION-----------------------------------
Condición
Esta hermosa, señorial, magnífica danza, verdadera joya de nuestro folklore, nos ha llegado con una historia plena de sugestiones embellecida por la leyenda.

Con respecto a su origen, una de las versiones más difundidas nos dice que su coreografía fue creada por el General Manuel Belgrano, un hermano suyo y varios ilustres patriotas, en Catamarca, hacia 1812 ó 1813, en honor de las tropas libertadoras del norte; y agrega que su nombre se debe a que aquél, invitado a bailarla, puso como "condición" la de hacerlo con una determinada dama de aquella provincia.
Pero los historiadores - que aunque gusten de la poesía nunca la cambian por la verdad averiguada -, nos dicen que, desafortunadamente, no hay documentos que abonen esas creencias, y que las tradiciones orales, sin precisar fecha, indican que el prócer bailó la Condición, en Catamarca, con la Sra. E l cira González de Olmos o con la Sra. Luisa González de Molla Botello, madre de la anterior.